Urkullu recibe en Burdeos la presidencia de la Eurorregión Euskadi-Aquitania

La Eurorregión Aquitania-Euskadi ha celebrado hoy en Burdeos la Cumbre en la que presidente del Consejo Regional de Aquitania, Alain Rousset, ha traspasado la presidencia de la Eurorregión al lehendakari, Iñigo Urkullu, para los próximos dos años. Ambos presidentes han ratificado el compromiso de sus Gobiernos en seguir reforzando la Eurorregión mediante una aportación de 1,1 millones de euros al 50%.

La Eurorregión buscará acercarse a los ciudadanos a través de la firma de un acuerdo sanitario y el desarrollo de acciones para informar a los habitantes de ambas regiones de los resultados de su trabajo. La conexión ferroviaria de alta velocidad entre el País Vasco y el sur de Francia, y el impulso de proyectos económicos transfronterizos continuarán siendo las prioridades.

Urkullu ha sostenido que los resultados obtenidos en sólo dos años demuestran que "la unión hace la fuerza" y ha manifestado su voluntad de dar continuidad al trabajo desarrollado bajo la presidencia de Rousset. Esto significará proseguir ayudando a los nuevos proyectos de cooperación transfronteriza y aprobar en junio el Plan Estratégico Aquitania-Euskadi 2020.

Este plan, que se encuentra en una fase avanzada de elaboración, va a plantear, según el lehendakari, objetivos "realistas" teniendo en cuenta que la renovación del Parlamento Europeo y la Comisión Europea dará lugar a nuevos equipos de trabajo y proyectos, y las limitaciones presupuestarias.

"No somos ajenos a esta realidad, pero vamos a trabajar codo a codo para superarla. Quiero que sepan que el compromiso de Euskadi con la Eurorregión, como lo es también el de Aquitania, es firme y decidido. Les garantizo que la Eurorregión es una prioridad para el Gobierno vasco", ha añadido.

Respecto a la red ferroviaria de alta velocidad, Urkullu ha asegurado que las instituciones vascas y aquitanas "reclamamos la implicación de las instancias europeas en este proyecto de alta velocidad ferroviaria, que es una prioridad para el eje atlántico europeo. Queremos garantizar la conexión de la Y vasca con Aquitania y asegurar su continuidad con Europa". El reto es que la conexión sea realidad antes de 2020.