“Algunos no han entendido lo que quiere plantear Arantza Quiroga”
Antón Damborenea (Bilbao, 1960) defiende que su partido no sufre una crisis en el País Vasco
Mide y medita mucho sus palabras Antón Damborenea (Bilbao, 1960) en medio de la pugna en el PP vasco por el relevo en su ejecutiva, una polémica en la que desempeña un papel clave desde su puesto de presidente vizcaíno.
Pregunta. ¿Era necesario abrir esta crisis?
Respuesta. No hay tal crisis. Hay planteamientos nuevos de cómo la presidenta quiere hacer las cosas. Cuando se plantea algún cambio siempre hay discrepancias, pero no estamos hablando de crisis ni mucho menos. En el congreso se verá que no existe.
P. Entonces, ¿cómo calificaría lo que está sucediendo?
R. Como nervios de algunos que no han entendido lo que quería plantear la presidenta, que todavía está en ello.
P. ¿Quiénes no lo entienden?
R. Los que han salido en la prensa diciendo demasiadas cosas antes de tiempo.
P. ¿Como quiénes?
R. Los que hayan salido. Ellos sabrán quiénes han dado versiones hasta de cosas o planteamientos que no existieron nunca.
P. Dirigentes de su partido creen que el problema no es de personas, sino de funcionamiento. ¿Qué falla en el PP vasco?
R. Toda organización es siempre mejorable. En los últimos años nos ha faltado que nuestro mensaje llegue claramente a quienes nos dirigimos. Hemos dado la sensación de mensajes no claros o duales sobre los mismos temas. Es un fallo a corregir.
P. ¿Es preciso relevar a Iñaki Oyarzábal?
El secretario general es un cargo de confianza del presidente. Es claro”
R. No sé. Depende de la presidenta. Una cosa es que el secretario general pueda ser otra persona distinta y otra que Iñaki Oyarzábal desaparezca. Sigue en el PP vasco, es portavoz de Educación y parlamentario.
P. Tras la crisis late un pulso por el liderazgo entre Arantza Quiroga y Alfonso Alonso.
R. Yo no lo veo. Aquí solo hay una candidata a presidenta que es Quiroga, que tiene el aval de Alonso. A partir de ahí, no veo esa competencia por el liderazgo. Se hubiera producido si hubiéramos tenido dos candidatos, cosa que no ocurre. El propio Alonso ha avalado a Quiroga. Eso no está puesto en entredicho.
P. ¿Pesa demasiado la influencia de Alonso en el PP vasco?
R. Es un personaje del PP vasco muy importante, no solo porque es el presidente de Álava, donde gobernamos, sino porque es el portavoz en el Congreso. En estos momentos es el cargo más importante del PP vasco.
P. La pregunta es si influye demasiado en sus decisiones.
R. No.
P. Quiroga desea un partido sin tutelas de Madrid.
R. El PP vasco siempre ha sido un partido que ha funcionado sin tutelas de Madrid y cuando ha tenido que criticar lo que hacía el PP en Madrid o el Gobierno del PP lo ha hecho si no estábamos de acuerdo. Eso es una seña de independencia del PP vasco, y si últimamente la hemos perdido habrá que recuperarla.
P. ¿Se ha perdido esa seña?
R. Creo que no, pero es una de nuestras señas desde hace muchos años.
P. ¿Cómo debe ser el secretario general del PP vasco?
R. Exactamente como dicen los estatutos del partido que tiene que ser. Cosa que Iñaki Oyarzábal ha cumplido hasta la fecha.
El PP vasco siempre ha sido un partido que ha funcionado sin tutelas de Madrid”
P. ¿Y por qué cambiarlo?
R. Porque el cargo de secretario general es un cargo de confianza del presidente. Así de claro. El secretario general no se elige en el congreso. Allí se elige al presidente, a los 22 miembros del comité ejecutivo y las ponencias que definirán la línea política los próximos años. Y luego el presidente propone al comité ejecutivo quién será el secretario general, vicesecretarios, etcétera.
P. ¿Nerea Llanos lo haría mejor como secretaria general?
R. Ya es secretaria general de Bizkaia y lo está haciendo muy bien. En el PP vasco hay mucha gente que lo puede hacer muy bien. El tema no es si lo puedes hacer mejor o peor, sino que Quiroga tiene que conformar el equipo que considere necesario.
P. ¿Qué peso debería tener Bizkaia en la nueva dirección?
R. Por lo menos el mismo que todos los demás y que sus planteamientos se tengan en cuenta.
P. Dirigentes alaveses insisten en la necesidad de que todo el mundo esté cómodo en el partido. ¿Hay incomodidad en Álava?
R. No sé quién se siente incómodo y si alguien se siente incómodo tendrá que decir por qué. Yo me siento incómodo cuando me parece que el partido hace cosas que entiendo que no debería hacer o decir. Esas incomodidades se tratan en los órganos del partido y la mayoría decide ir por un sitio u otro.
P. ¿Qué solución atisba?
R. Arantza conoce muy bien el partido. Supongo que hará una propuesta que probablemente disguste a todo el mundo, pero que a todo el mundo le parezca razonable.
P. ¿Aceptaría un compromiso para un número dos alavés?
R. No entremos en quinielas. Vamos a esperar a que la presidenta proponga su equipo y ahí veremos qué nos parece.
P. ¿Vería bien a Javier de Andrés en ese puesto?
R. Javier de Andrés es diputado general de Álava. Me parece que es un puesto más importante que ese, pero bueno. Por supuesto que le veo a Javier de Andrés y a mucha más gente.
P. ¿Qué partido debe salir del congreso?
R. Un PP con una alternativa no ya al nacionalismo, que también, sino de futuro para los vascos. Y un PP que tenga muy claro que en esta fase del fin de ETA no puede haber premios para quienes deciden que ahora no procede matar, pero celebran los asesinatos producidos hasta ayer.
Nos ha faltado que el mensaje llegue claramente a los que nos dirigimos"
P. Sigue el choque entre los dos Gobiernos y entre PP y PNV sobre la gestión del final de ETA.
R. No estamos viendo que el PNV esté en la deslegitimación de ETA. Se lo oímos al lehendakari, pero hace lo contrario. En los últimos meses, la actuación del PNV y del Gobierno vasco no va en la dirección de deslegitimar a ETA, sino de legitimar a Bildu.
P. ¿Qué opina del primer gesto de desarme de ETA?
R. Es un paripé absurdo de una banda terrorista que ha matado a más de 800 personas.
P. ¿Cómo va a defender en su ponencia la política económica de un Gobierno que ha incumplido buena parte de sus promesas?
R. Parte no, casi todas. Hemos incumplido todo porque no podíamos cumplir nada. La finalidad ya no era intentar frenar el paro o crear empleo, sino sobrevivir como país. Y en estos dos años, con las medidas del Gobierno, criticado por todos, el país empieza a salir. Y ahora es cuando puedes empezar a hacer lo que pensabas que había que hacer hace dos años. En el País Vasco tenemos un Gobierno a remolque de lo que se hace en España.
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