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La política secesionista del Consell anima a la ultraderecha, según la oposición

El PSPV, Compromís y EU muestran su solidaridad con la Acadèmia Castellano asegura rechazar "todo tipo de coacción"

La fachada del edificio en el que reside el presidente de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL), Ramon Ferrer, en el centro de Valencia, amaneció el viernes con pintadas en las que se le calificaba de “catalanista” a Ferrer y se pedía la “derogación” de la institución normativa. Estaban firmadas por el Grup d'Acció Valencianista (GAV), próximo a la extrema derecha.

Estas pintadas se suman a las aparecidas también en los muros frente al monasterio de San Miguel de los Reyes, sede de la Acadèmia, y en la Ronda Norte, tras la publicación del Diccionari Normatiu, que apuesta por la denominación de valenciano, sin ser excluyente, y reconoce la unidad lingüística con el catalán.

La reacción airada contra el Diccionari del PP y del Consell, que incluso amagó con cerrar la Acadèmia (aunque para ello necesita los votos de oposición porque es un organismo estatutario), está dando alas a este grupúsculo minoritario. Así lo entiende la oposición, que este domingo salió a la palestra para denunciar los intentos de resucitar el conflicto lingüístico.

El secretario general del PSPV, Ximo Puig, lamentó en un comunicado las pintadas en casa de Ferrer, con el que se ha puesto en contacto “para trasladarle todo el apoyo”. También criticó “el absurdo e irracional acto, propio de extremistas”, y defendió “el trabajo realizado por la AVL a favor del valenciano”. El portavoz de Compromís en las Corts, Enric Morera, censuró los ataques y mostró, a través de Twitter, su “solidaridad” con Ramon Ferrer, al tiempo que se preguntaba: “¿Quién favorece la ignorancia y anima el conflicto violento?”.

Por su parte, el portavoz adjunto de EUPV en las Corts, Ignacio Blanco, señaló que este ataque “hace revivir momentos muy oscuros de la historia valenciana” y exigió a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, al Ministerio del Interior y a la Delegación del Gobierno que “empleen la máxima diligencia para perseguir estos comportamientos violentos que, lamentablemente, determinadas declaraciones del PP están dando aliento”.

Después de estas declaraciones, el secretario general del PPCV, Serafín Castellano, que fue el que inició las críticas a la Acadèmia, expresó en las redes sociales, su “rechazo” al ataque a Ferer, y recordó que su formación “siempre” rechaza “todo tipo de coacción, sea de quien sea,venga de donde venga”.

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