El sumario apunta pagos a un edil del BNG y al jefe de la policía de Ourense

Los seúres (sobres con dinero) de Vendex circulaban en campaña electoral en Ourense, según se detalla en el sumario de la Operación Pokémon. Los pinchazos telefónicos ponen al descubierto las dificultades financieras del delegado de la empresa en Ourense, Adrián Cordero, para afrontar los supuestos pagos. Pero este se muestra dispuesto a recurrir a la cuenta de la filial del grupo, en la que detalla que tiene parte del dinero de la hipoteca. Entre los políticos y cargos que, según consta en el sumario, Cordero menciona como receptores de los pagos figura, además de El Pacorro (el exalcalde de Ourense, Francisco Rodríguez) y El Bigotes(el jefe de la policía local, Abelardo Ulloa), el exedil del BNG Fernando Varela, entonces responsable de de Deportes, y anteriormente de Tráfico. Varela dimitió por su imputación en este caso.

El 13 de mayo de 2011, Cordero explica a Tutor las dificultades para reunir el dinero y le advierte de que “el Fernando se mosqueó” y que él ya no le coge el teléfono porque no sabe qué decirle. Tutor le pregunta si sacó “papeles” (dinero) y Cordero le responde que sí, pero que no le llega. “Que le voy ahora, ¿con dos mil y algo papeles?”, pregunta. Su jefe le sugiere que retire cada día una cantidad y vaya juntando “porque el lunes lo ves y ya está”. Cordero replica a Tutor que en realidad el concejal pregunta por él, que lo está esperando y que él le dijo: "Fernando, el tema ya está hecho, más que hecho y requetehecho… ahora, yo no sé si es el día 3, el día 6 o el día 15". Agobiado por la falta de liquidez, Cordero le pide a Tutor que le eche una mano, pero este se escabulle y le indica que juegue con las dos cuentas de la empresa. El delegado en Ourense le explica que una se la vació él “y además hice la transferencia de Verín … no es mucho pero fueron 3.000”. Acto seguido propone transferir a una cuenta 6.000 euros de otras dos. “Voy yo a mi sitio y lo cojo. Paso de quedar más mal. Como tengo ahí una parte de la hipoteca sin tocar… Lo saco yo y ya está". Como consecuencia de esta conversación la juez entiende que Fernando Varela, a quien los agentes de Audanas habían localizado en una entrevista en un restaurante en las afueras de la ciudad con los responsables de Vendex, “pudo haber aceptado una dádiva en metálico en pago de las gestiones realizadas” con contratos municipales.

Entre los funcionarios que supuestamente cobraban sobres de Vendex destaca el jefe de la Policía Local de Ourense, Abelardo Ulloa. Según se desprende del sumario, este recibía desde hacía años pagos periódicos. El informe de Aduanas incluye una conversación entre Cordero y Tutor en abril de 2012 en la que los directivos de la empresa no encuentran justificación al “excesivo gasto, 14.000 euros, en comidas” del año anterior por lo que Cordero le pide a una empleada que revise las cuentas. Cuando esta le informa le envía un mensaje a Tutor que refleja que en realidad destinaron a comidas 1.220 euros. El resto, hasta los 14.000, se lo atribuyen a entregas a El Bigotes. Los empresarios ponen el grito en el cielo y comentan que Vendex llevaba además tres o cuatro años pagando viajes a Ulloa.

Las conversaciones entre los dos directivos sobre el jefe de policía y de ambos con este evidencian el poder de Ulloa. Aduanas concluye que el mando policial, molesto porque el grupo incumplió la promesa de enchufar a una amiga, los amenaza con hacerles inspecciones. Los pinchazos desvelan otras conversaciones en las que Cordero se queja de la financiación de actos culturales a petición de la concejala de Educación, la socialista Ana Garrido. El delegado ourensano explica a su jefe que, aunque son actuaciones propias de Cultura “ella se metió, se metió” y logró que la empresa, que aspiraba al contrato de limpieza en centros educativos, financiara incluso un catering. “Vamos en 9.000 euros con esta tía; o en 10.000”, calcula.