Puig no descarta crear “el problema valenciano” si no mejora la financiación

“Cuando un Gobierno no tiene respuestas, es la hora de que hablen los ciudadanos”, proclamó ayer el secretario general de los socialistas valencianos, Ximo Puig, en una conferencia que ofreció en el Club de Encuentro Manuel Broseta bajo el título La decisión valenciana. El secretario general del PSPV-PSOE insistió así en su reclamación al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, para que convoque elecciones anticipadas. “Los valencianos queremos decidir”, insistió.

Después de negarse a asumir cualquier fatalismo y señalar que la sociedad valenciana está en una “encrucijada”, Puig dijo que hay que “salir juntos” de la crisis, alrededor de un “proyecto sólido e integrador en el que no hace falta que estemos todos de acuerdo en todo”, y con un “liderazgo inclusivo, responsable, capaz y potente”. Y abogó por adoptar decisiones “hacia dentro y hacia fuera”. En este sentido, propuso resituar a la Comunidad Valenciana en el conjunto de España que implique, “si es necesario”, la creación de un “problema valenciano”.

La “crisis ética, económica y social tiene más calado que en el resto de España”, diagnosticó Puig, que desgranó la pérdida de peso de la renta per cápita valenciana, los 30.000 millones de euros de deuda de la Generalitat, el paro que afecta casi al 30% de la población y el tercio de ciudadanos que cobra por debajo del salario mínimo.

La grave situación, según el dirigente socialista, tiene tres causas: “Un modelo económico equivocado, una gestión profundamente errónea y una manifiesta infrafinanciación”. Por lo que se refiere a la “continuada discriminación de la Comunidad Valenciana como consecuencia de nuestra invisibilidad en el conjunto de España”, Puig calificó de “injustificable” la insuficiencia financiera mantenida por los sucesivos Gobiernos en Madrid, “especialmente los del PP, pero también los del PSOE, que disminuyó pero no eliminó esta desigualdad”.

Tras constatar la desafección respecto a la política causada por la corrupción y reclamar ejemplaridad, el líder del PSPV-PSOE aseguró: “La transparencia no es una opción. Es una obligación de los administradores y un derecho del ciudadano”. Puig destacó que su partido potenciará la participación ciudadana en las elecciones primarias abiertas que se dispone a celebrar.

“Hay margen para la política”, comentó el dirigente y diputado en el Congreso, que indicó, ya metido en terreno económico: “La vía a la prosperidad que propongo pasa por fortalecer la empresa, y fortalecer la empresa es fortalecer el diálogo social”. Puig se mostró partidario de “crear una economía de la corresponsabilidad” y afirmó: “La cohesión social solo es posible si es económicamente sostenible. Y la sostenibilidad pasa por gestionar bien los recursos”.

El secretario general del PSPV-PSOE planteó la necesidad de “refundar la Generalitat” y advirtió: “Sin un cambio de gestión, la Generalitat será una institución zombie”. E insistió: “No se puede pretender reclamar mejor financiación si no gestionamos bien lo que tenemos”. Incrementar los medios de la Administración tributaria valenciana, impulsar una ley contra el fraude fiscal y reformar los tributos autonómicos para hacerlos más progresivos fueron algunas de sus propuestas en relación con los ingresos.

“Tenemos que romper nuestra invisibilidad”, dijo Puig, que afirmó que “la decisión valenciana es decidir en España”. “Nuestro proyecto de Comunidad”, añadió, “no puede depender de la bondad del ministro de Hacienda de turno ni enzarzarse en guerras estériles con otras comunidades, ni del norte, ni del sur ni del oeste”.