El Fin de Año anuncio

Por primera vez en su historia, Barcelona despedirá el año con una gran celebración. Pero, por lo que explican sus impulsores, más que la gente que pueda asistir a la fiesta, lo importante es lo que se vea al día siguiente en las televisiones de todo el mundo. El objetivo es que Barcelona consiga erigirse en imagen icónica del Fin de Año, como desde hace años lo son Nueva York, Londres, París o Sidney. El Fin de Año anuncio, al fin y al cabo.

El escenario será la avenida María Cristina, con sus fuentes y el Museo Nacional de Arte de Cataluña de fondo. Un espectáculo que repetirá elementos clásicos de piromusical, pero que se completará con elementos tecnológicos ideados por la Fura dels Baus, que también recuperará su Ser del Milenio.

Más allá de ser un reclamo para turistas con ganas de fiesta, el Ayuntamiento de Barcelona quiere convertir el acto en una "fiesta familiar", como ha señalado hoy el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, quien ha reiterado que no se trata de ninguna "verbena". Se abrirán puertas a las nueve de la noche y quince minutos después del final del espectáculo (00.15), que durará 45 minutos, se cerrarán. Ni se permitirá la entrada de envases de vidrio ni la venta de bebidas alcohólicas. El Consistorio evita cuantificar cuántas personas irán a la fiesta, pero da por sentado que la cifra será inferior a las 100.000 que rondan el piromusical de la Mercé.

El sector turístico llevaba años reclamando un acto similar que diera más vida a Barcelona, cuyos hoteles pasan en diciembre uno de sus peores meses del año. Al final, Turismo de Barcelona se ha convertido en el promotor del evento, que deberá de buscar fondos privados de patrocinadores para cubrir los 400.000 euros que costará la fiesta. El Ayuntamiento de Barcelona correrá con los gastos de limpieza y de seguridad. Mercabarna, por ejemplo, se ha comprometido a repartir bolsas con uvas entre los asistentes.

"La ciudad de Barcelona se merece tener el último día del año un acto importante como tienen otras ciudades del año", ha señalado el presidente de Turismo de Barcelona, Joan Gaspart, quien ha recordado que la fiesta es un hito que se perseguía desde hace años. "No interesa tanto la gente que venga como la repercusión que tenga en las televisiones", señaló. "Es una buena ocasión para promocionar Barcelona", ha coincidido Josep Lluís Bonet, presidente de Fira de Barcelona, que también patrocina el acto, como el Gremio de Hoteles. Su presidente, Jordi Clos, ha asegurado que si se ha celebrado ahora y no antes es porque "realmente ha habido alguien que lo quería hacer".