La empresa de limpieza de Málaga planea despidos temporales hasta 2017
Las suspensiones de empleo serán rotatorias y afectarán a toda la plantilla
El expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que la empresa de limpieza de Málaga (Limasa) piensa aplicar a partir del próximo 1 de enero, salvo que antes se alcance un acuerdo sobre el convenio laboral, será rotatorio, se alargará hasta abril de 2017 y afectará a los 1.274 trabajadores que integran la plantilla, quienes dejarán de trabajar 111 jornadas, y al personal administrativo, 60 personas a las que se le reducirá el horario. En esa fecha expira el contrato con los tres socios privados que tienen el 51% de la sociedad mixta (el 49% restante es del Ayuntamiento). Los representantes sindicales rechazan la medida y previsiblemente formalizarán este miércoles la convocatoria de huelga indefinida anunciada para Navidad, a partir del 20 de diciembre.
La dirección de la empresa entregó ayer la memoria que justifica esta acción a la mesa representativa de los trabajadores y a la autoridad laboral. Ahora se abre un plazo de 15 días de negociación, aunque las variaciones, si las hubiera, se ceñirían a cuestiones menores de distribución. La intención de Limasa, que en 2014 cuenta con un presupuesto de 86 millones de euros, es ahorrar unos 7,1 millones de euros.
El ERTE se apoya en causas “organizativas y productivas”. El documento habla de la “rigidez” de la plantilla, formada por un total de 1.334 personas, y de la “dificultad” para el equilibrio de la empresa que han supuesto las “ventajas económicas y sociales” incorporadas en los últimos convenios. Añade que el coste laboral de Limasa se ha encarecido un 30% desde su constitución, en 2002.
La propuesta de ERTE contempla que cada trabajador permanecerá suspendido cerca de cuatro meses. En concreto, según informó la empresa, será un máximo de 111 jornadas laborales que equivalen a 155 días cotizables. La reducción media sería del 28%, aunque ese porcentaje variará en función de la época del año y de las categorías laborales. Entre junio y septiembre, por ejemplo, la presencia de operarios en la calle será mayor, con una bajada aproximada del 10%, según el concejal de Medio Ambiente de Málaga, Raúl Jiménez. El periodo más afectado es el invierno.
Los trabajadores dejarán de prestar el servicio durante dos semanas alternas cada dos meses y podrán solicitar el desempleo hasta su reincorporación. El expediente laboral también atañe a los cargos directivos y a los 60 empleados del área administrativa, que tendrán un reducción del 28% de la jornada laboral.
Las negociaciones para renovar el convenio colectivo están paralizadas y el presidente del comité de empresa, Manuel Belmonte, acusó a la empresa y al Ayuntamiento de romper “unilateralmente” el diálogo. La intención de los trabajadores es formalizar este miércoles la convocatoria de huelga. Belmonte tachó el ERTE de “lamentable y vergonzoso” y advirtió de la merma que sufrirá el servicio. Jiménez insistió en la necesidad de cuadrar las cuentas y apostó por la negociación para fijar las medidas más convenientes para todas las partes.
Limasa ha planteado congelar los salarios en 2014. Los principales escollos son la eliminación de la paga de productividad (unos 868 euros) y la reducción de un 15% del plus de actividad (entre 40 y 160 euros menos al mes, según la escala laboral), que los trabajadores rechazan.
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha confiado este lunes en que, finalmente, no haya huelga del servicio de limpieza, tal y como han anunciado los trabajadores, y “el sentido común, la sensatez y el diálogo permitan encontrar soluciones”.
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