De Lara se aparta del ‘caso Pokémon’ hasta que se resuelva su recusación

La juez Pilar de Lara, instructora de la Operación Pokémon, se ha apartado de la causa a la espera de que la Audiencia Provincial de Lugo resuelva sobre la recusación planteada por un imputado. La legislación obliga a los jueces instructores a dejar temporalmente un caso mientras se resuelve una petición de recusación. Según explican fuentes judiciales, el sumario de la Operación Pokémon está en manos de la juez de refuerzo de la causa desde hace unos días y, de hecho, fue ella quien aprobó la última prórroga del secreto de sumario y la que resolverá todas las cuestiones urgentes que surjan en el procedimiento mientras la Audiencia no hace público su dictamen.

Fuentes cercanas al caso adelantan que la decisión sobre si De Lara debe seguir al frente de la investigación no se hará esperar. De momento las numerosas partes deben presentar un informe sobre la recusación de la magistrada en un plazo de tiempo que acaba este mismo jueves. Después será la titular del juzgado lucense la que informe sobre el asunto y, basándose en estos documentos, la Audicencia decidirá.

La recusación ha sido solicitada por la representación del imputado en la causa Miguel García-Gesto. Además, la defensa del alcalde de Lugo se adhirió "a la recusación formulada por la representación procesal de Miguel García-Gesto, sobre la base de que sean ciertos los hechos en que se funda", según había justificado. El pasado 4 de octubre le fue notificada la providencia de fecha 30 de septiembre por la que se admitía a trámite la recusación de la titular del órgano judicial, Pilar de Lara Cifuentes, dándose traslado a las partes por el plazo de tres días con el fin de que adhieran o se oponga a la causa de recusación, según recoge el escrito presentado por la defensa de Orozco.

La defensa de García-Gesto alude en la petición de recusación a un incidente a la salida de un restaurante en agosto en el que este imputado en la causa y la jueza Pilar de Lara supuestamente se cruzaron insultos y amenazas. En las alegaciones se señala que la magistrada "actúa como denunciante". Por ello, se alega "enemistad manifiesta" entre la jueza instructora de la Pokémon y García-Gesto. Por ello, considera que "la imparcialidad de la señora magistrada se encuentra seriamente comprometida", por cuanto los hechos aludidos anteriormente "pueden sembrar serias y razonables dudas sobre su imparcialidad respecto del señor García-Gesto" en las diligencias previas de la Pokémon.