UPyD quiere eliminar el aforamiento de los políticos madrileños

Unión, Progreso y Democracia insta en una Proposición No de Ley que se debatirá en el pleno de este jueves a que se realicen todas “las reformas legales necesarias” para “suprimir” todos y cada uno de los supuestos de aforamiento. Ahora mismo el Estatuto de Autonomía reconoce el “privilegio” de aforados a los 129 diputados regionales de la Asamblea de Madrid —72 del PP, 36 del PSM, 13 de IU y ocho de UPyD—, al presidente de la Comunidad y a los consejeros de su equipo de Gobierno (en la actualidad son ocho).

El artículo 11 del Estatuto prevé la inmunidad y condición de aforados de los cargos citados ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), salvo para los actos delictivos cometidos fuera del ámbito territorial de la región. A su vez, el artículo 25 prevé el aforamiento del presidente del Ejecutivo autonómico en materia civil y penal ante el Tribunal Supremo, así como del vicepresidente —figura que no hay en el Gobierno de Ignacio González, que durante nueve años ostentó ese cargo, entre otros— y los consejeros ante el TSJM o el Supremo, en función del ámbito territorial de que se trate. Los mismos privilegios se preveían para el Defensor del Menor hasta que se suprimió la figura en mayo de 2012.

“Somos contrarios a la figura del aforado, es un privilegio que se debe eliminar después de haber proliferado hasta alcanzar cifras increíbles, al impulso de leyes autonómicas y estatales”, razona el portavoz de UPyD en el Parlamento madrileño, Luis de Velasco. La formación magenta entiende que la inviolabilidad e inmunidad parlamentarias “pudieron tener sentido en el pasado” pero “tales argumentos resultan escasamente comprensibles hoy en día”. En concreto, porque con el aforamiento “se alteran” las reglas de competencia judicial penal en beneficio de determinadas personas que tienen derecho a ser encausadas y juzgadas por determinados tribunales previamente señalados. Además, mientras la inviolabilidad impide la apertura de cualquier clase de procedimiento que tenga por objeto exigir responsabilidad a sus señorías por las opiniones manifestadas en el ejercicio de sus funciones, la inmunidad somete determinados procesos al requisito de la autorización de la Cámara legislativa.

Por poner ejemplos de países cercanos, en Alemania y Reino Unido no existe un solo aforado en la actualidad. España, con más de 10.000 aforamientos, tampoco sale muy favorecida de la comparación con Portugal e Italia, donde la única figura aforada que se da es la del presidente de la República. Por su parte, en Francia los aforados no pasan del Presidente de la República, el primer ministro y los ministros. El Congreso de los Diputados rechazó el pasado junio, con 19 votos a favor, 184 en contra y 98 abstenciones, una petición de UPyD de “reflexionar y actuar” sobre el aforamiento de cargos públicos.