Urinarios y chalecos del SAMU a cargo de la caja fija

“Algunas litografías que un antiguo consejero de Sanidad se llevó; chalecos del SAMU para la visita del Papa”, desgranó el diputado socialista Rafael Rubio. “Y hasta parte de los urinarios móviles de la visita del Papa se cargaron ahí”. El parlamentario, —a quien el Consell acaba de confirmar por escrito que para la visita de Benedicto XVI en 2006 a Valencia se pagó de la caja fija de la dirección general de Asistencia Sanitaria “la indumentaria del personal de ambulancias”—, añadió este jueves estos ejemplos a la variedad de gastos imputados a la caja fija de la Generalitat que se conocen y que han levantado polémica. Una polémica que no es menor, como recordó, porque de 2010 a 2012 sumaron 351 millones de euros.

Mònica Oltra, de Compromís, defendió la creación de una comisión de investigación sobre el tema y se remitió al informe de la Sindicatura de Comptes, que señala el deficiente control, así como a una comparecencia del interventor general, que reconoció que ciertas facturas “no correspondían a imputables en caja fija”. Los pagos de atención inmediata o los “gastos de carácter periódico-repetitivo” limitan la caja fija y la diputada se preguntó si una cena de Navidad, compras en supermercados o un viaje a Roma de una persona ajena a la Administración como Juan Ramón Pin pueden justificarse.

El popular Ricardo Costa, tal vez el único diputado del PP de cuantos intervinieron en el pleno que consiguió enardecer a su decaído grupo parlamentario, defendió los controles de la caja fija y la acusó de mentir porque sabe que en la documentación hay un error que atribuye a un viaje a Roma lo que era en realidad un vuelo Madrid-Valencia para participar en una convocatoria de la Generalitat. Esther López Barceló, de Esquerra Unida, señaló que muchas autorizaciones de la caja fija están firmadas irregularmente por jefes de gabinete de los consejeros.

La última de las nueve comisiones de investigación rechazadas por el PP en el pleno se refería a Valmor, la empresa de la Fórmula 1. La socialista Eva Martínez, a quien dio réplica la popular María Fernanda Vidal invitándola a acudir a la fiscalía, consideró un escándalo la compra por el Consell de esa sociedad y sus 64 millones en pérdidas. “No hace falta que nos anime”, le dijo a la diputada del PP, “ya hemos ido a la fiscalía y a los tribunales”. Martínez reiteró una advertencia que la oposición ha frecuentado estos días: “No vamos a parar hasta 2015”. Entonces se abrirán “los cajones donde esconden sus vergüenzas”.