Prisión para el hombre acusado de matar a su mujer e hijo de cinco años en Málaga

La titular del Juzgado de Violencia de Género 3 de Málaga ha decretado el ingreso en prisión sin fianza del hombre acusado de matar a su mujer y a su hijo de cinco años el pasado lunes en el barrio de La Luz de la capital. Miguel Ángel G. G., de 36 años, se ha negado a declarar ante la juez, que le imputa dos delitos de asesinato y otros dos de malos tratos, uno de los cuales estaría relacionado con una supuesta agresión al padre de la mujer y abuelo del pequeño. Al presunto autor del doble crimen no le constan antecedentes por violencia machista.

El acusado apenas ha estado 20 minutos en las dependencias judiciales, a donde fue trasladado por la mañana desde la comisaría provincial casi al límite del plazo legal de detención de 72 horas por la conveniencia de practicar algunas diligencias. En su declaración ante la policía, el acusado habría reconocido algunos de los hechos, aunque su testimonio presentaría incongruencias con la reconstrucción realizada por los investigadores.

Según fuentes oficiales, Miguel Ángel G. G. es toxicómano y tiene antecedentes policiales. La Subdelegación del Gobierno ha confirmado que era investigado por dos supuestos robos con violencia a prostitutas en un polígono de la capital malagueña. El acusado, con un apósito sobre la ceja izquierda, llegó al juzgado fuertemente custodiado por la policía y fue recibido a gritos por un grupo de familiares y allegados de las víctimas, que protagonizaron varios momentos de tensión. Media docena de personas fueron desalojadas de las dependencias judiciales.

El cuerpo sin vida de la mujer, de 26 años, y de su hijo fueron encontrados en una cama de su vivienda, ubicada en la calle Isaac Peral. Fue el padre de la joven quien halló los cadáveres tras acceder al domicilio por el balcón, después de pasar varias horas intentando localizar sin éxito a su hija. En el interior de la casa estaba el presunto asesino, con el que habría tenido una pelea, aunque logró huir. Fue detenido una hora después en un control de tráfico. La mujer tenía una herida de arma blanca en la parte posterior de la cabeza, aunque la autopsia reveló que las dos víctimas murieron por asfixia.