El PP da largas al desafío de Díaz para que haga públicas las rentas

Dos semanas después de prometerlo en su investidura, Susana Díaz entregó ayer en el registro del Parlamento de Andalucía su última declaración de renta y también la de su marido. Inmediatamente después también la colgó en la web de la Junta de Andalucía. Con este gesto, que van a tener que imitar todos los miembros del Gobierno andaluz y también del grupo parlamentario socialista, la presidenta de la Junta mete aún más presión a un desarbolado Partido Popular andaluz, cuyo portavoz, Carlos Rojas, calificó de “teatro” la decisión de la socialista, aunque no aclaró si la seguiría. Media hora antes que la presidenta, la portavoz adjunta de IU, Alba Doblas, dio a conocer los datos fiscales de los 12 diputados de su grupo y de sus cónyuges.

Hasta ahora todos los diputados andaluces están obligados presentar su declaración de bienes, intereses y actividades, de las cuales se da cuenta en la web del Parlamento. También entregan sus declaraciones de renta, pero estos datos, que custodia el letrado mayor, no son públicos, salvo que los interesados hayan querido hacerlo.

En la anterior legislatura, los 109 diputados de la Cámara dieron a conocer sus rentas, después de otro gesto del anterior presidente, José Antonio Griñán, que decidió hacerlas públicas. El paso de Griñán generó una intensa presión en el entonces líder del PP, Javier Arenas, que tardó 16 días en imitar al socialista. Cuando lo hizo no solo se comprobó que cobraba más que el presidente de la Junta —cuando había mantenido que ningún alto cargo o político debía superar sus ingresos— sino que además percibía un sobresueldo de su partido, los llamados “gastos de representación” en lenguaje del PP.

Díaz ha seguido la estela de Griñán, que tenía en el escaparate de Internet todos sus ingresos tributarios declarados de manera conjunta con su esposa. Pero la presidenta ha dado un paso más al colocar también en el expositor a las parejas de los políticos, aunque estos tengan separación de bienes.

Díaz declara en 2012 unos ingresos brutos de 59.894,44 euros y su esposo, José María Moriche, empleado en una librería, 15.171,55 euros. La primera declaración es positiva por 1.423,15 euros y la segunda, negativa en 550,22 euros. Ambos comparten una vivienda habitual en Triana y un solar no edificado contiguo; tres vehículos; dos créditos por 161.625,89 euros; un seguro de vida de 350.000 euros; una cuenta a plazo fijo con 14.400 euros y una cuenta corriente con 2.580 euros.

Los 12 consejeros presentarán sus datos y los de su pareja el próximo lunes. No está claro cuándo lo harán los diputados socialistas a los que Díaz pidió en una reunión antes del pleno del Parlamento de ayer un “sobreesfuerzo de transparencia”.

La medida de la presidenta de la Junta no fue debatida en esa reunión. Pero sí hubo comentarios en privado de algunos parlamentarios socialistas que cuestionaron que una medida de este tipo ayude a prestigiar la política, el fin que dice perseguir Susana Díaz.

“No es justo lo que os estoy pidiendo, no tenemos obligación legal, pero sí tenemos la responsabilidad de recuperar la confianza en la política”, les dijo a los diputados en la primera reunión que mantuvo con ellos.

Díaz afirmó que los ciudadanos ven a los políticos “peor” de lo que estos piensan y reconoció el daño que los casos de corrupción está haciendo en los partidos. “Especialmente a los socialistas, el caso de los ERE. Nuestros adversarios utilizan esta herramienta para golpearnos”, subrayó. En esta reunión, Díaz mostró su perfil de mujer de partido al marcar al PSOE el objetivo de “recuperar la confianza mayoritaria, si es posible muy mayoritaria” en las próximas elecciones. “Si fueran hoy las elecciones, seríamos la fuerza mayoritaria, pero las elecciones no van a ser hoy, apostamos por agotar la legislatura”, señaló.

Desde el Partido Popular y también desde Izquierda Unida, socio de coalición de los socialistas, se intentó minimizar el paso dado por Díaz. IU le quitó trascendencia porque lo hace “desde hace muchísimo tiempo”, aunque nunca habían dado la de los cónyuges, todos ellos con menos ingresos que los parlamentarios. Alba Doblas señaló que “los cobros en B que parecen que cobran algunos diputados no van a aparecer” en las rentas, por lo que el que estas se hagan públicas tiene un “valor relativo”.

Los populares no aclararon sin van a seguir el ejemplo de la presidenta andaluza, cuyo gesto fue calificado de “vodevil” y “humo” por parte de su portavoz, Carlos Rojas. Este propuso que se dieran a conocer los datos fiscales de los familiares de los altos cargos de la Junta después de que hay resultados imputados “hermanos, suegras, vecinos y amigos” del PSOE. El PP defenderá hoy una iniciativa en la que se insta al Gobierno andaluz a adoptar una batería de medidas en favor de la transparencia en la Junta y en todo el sector público autonómico. El presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido, ya dio a conocer su renta que es conjunta con su esposa.