El Born abre con la previsión de un déficit de dos millones de euros en 2014
Los ingresos permitirán cubrir un 60% de los gastos del equipamiento El Born aspìra a vender unas 520.00 entradas durante su primer año
Tras 12 años de obras y 84 millones de euros de inversión, el próximo lunes abrirá sus puertas el Centro Cultural del Born. Se trata de un esperado equipamiento que desde el principio ha estado marcado por la polémica: los restos subterráneos de la Barcelona asediada por las tropas borbónicas en 1714 despiertan todo tipo de pasiones, acrecentadas con el ambiente político en Cataluña. Sin embargo, nadie niega la importancia histórica del recinto, que está pensado como un polo de atracción cultural y que le añadirá a la oferta de la ciudad, a partir de octubre, presentaciones de títeres, conferencias, conciertos... Su coste de funcionamiento ascenderá a cinco millones de euros anuales. Y, de entrada, tendrá un déficit de dos millones, al menos para su primer año con las puertas abiertas.
Los ingresos que se prevén recaudar por concepto de entradas y actividades solo cubren el 60% de estos gastos. Desde el Ayuntamiento aseguran que este grado de cobertura es alto, comparado con el de otros equipamientos culturales. En grandes centros como el MNAC o el CCCB, el grado de cobertura de los ingresos y los gastos escasamente llega al 30%, aunque cada centro es un universo, según puntualiza una fuente del sector museístico.
Una ciudad bajo la ciudad
El principal atractivo del Centro Cultural del Born es la posibilidad de ver los restos arqueológicos de la ciudad arrasada por las tropas de Felipe V, unas 50 casas y palacios del siglo XVIII. Estas se podrán ver parcialmente desde unos balcones o con detenimiento si se compra la entrada. Hay una de 6 euros y otra, reducida, de 4,2 euros.
La oferta del centro, además de lo museístico, la complementan una librería y un espacio gastronómico que llevará la cervecera barcelonesa Moritz, bajo la tutela del chef Jordi Vilà (una estrella Michelin). En la carta habrá comida tradicional sobretodo.
Las jornadas de puertas abiertas inaugurales serán del 12 al 29 de septiembre, entre las 10 de la mañana y las siete de la tarde. El lunes no presta servicio el centro.
Inicialmente, el mismo quinto teniente de alcalde, Jaume Ciurana (CiU), aseguró que el funcionamiento diario del Born costaría tres millones de euros \[son exactamente 3,7 millones\]. “Un presupuesto tres veces menor que el del CCCB”, resaltó el regidor el pasado 26 de julio, durante la presentación del recinto a los periodistas. Sin embargo, esta cifra se eleva a cinco millones si se tiene en cuenta el coste de las exposiciones temporales, las actividades y los gastos de personal, esta última partida asciende a 482.300 euros.
Según el Informe Justificativo para la aprobación de los precios del Born Centre Cultural, con fecha del 29 de mayo de este año y al que ha tenido acceso este diario, los ingresos que el centro espera recaudar llegan a los tres millones de euros. De estos, 2,6 millones ingresarán por la venta de entradas para las exposiciones y 376.000 euros por actividades que se realicen en las salas.
Las entradas para el centro cultural costarán seis euros para el público general, y también habrá una tarifa reducida de 4,2 euros para menores de 29 años, portadores de la Tarjeta Rosa y titulares de la tarjeta de las bibliotecas de Barcelona, entre otros colectivos. Así, con un promedio de cinco euros por ticket, las aspiraciones del equipamiento, dirigido por Joaquim Torra, son que unas 520.000 personas compren su entrada. Esta da acceso a las dos salas de exposiciones y a recibir una audioguía que explica el yacimiento arqueológico, que se puede ver desde el gran balcón.
Según el Informe Barcelona Cultura 2012, el MACBA recibió unos 710.000 visitantes, el Museo de Historia de Barcelona (MUHBA), 589.000 y el Museo Marítimo, 478.000. Así, las ambiciones de visitas del Born se ubican en el segmento de los más visitados dentro de la pirámide de los equipamientos de cultura municipales.
Desde el Instituto de Cultura de Barcelona aseguran que estas cifras son orientativas y que se incrementará la autosuficiencia económica del centro en un futuro. “Será más conocido y esto atraerá más posibilidades de patrocinio”, aseguró un portavoz. El alquiler de salas para eventos es también una fuente de ingresos para los centros culturales, por ejemplo la Sala Oval del MNAC. Las salas del Born, sin embargo, no son tan grandes —son cuatro y miden 600 metros cuadrados—, por lo cual fuentes museísticas dudan de su atractivo en el mercado.
Otra de las dudas que queda sobre la mesa es si las mismas proyecciones del Informe se repetirán en después de 2015. El Centro Cultural del Born, que desde el PP consideran un “parque temático del independentismo”, tendrá un papel fundamental durante los fastos de celebración del Tricentenario de 1714, lo que le dará gran publicidad y atraerá visitantes. De momento, la programación tiene un marcado acento independentista, más allá de la exposición permanente, Barcelona 1700. De les pedres a les persones, que cuenta con 1.800 piezas rescatadas de las excavaciones. La temporal, con la que se abre la programación, se llama Fins a Aconseguir-ho! El Setge de 1714, un gran montaje audiovisual que reconstruye la batalla del 11 de septiembre.
También seguro, habrá jornadas de puertas abiertas, visitas de colegios, la curiosidad inicial... ¿Y después qué? “Planteamos diversas locomotoras para tirar del equipamiento porque no buscamos un visitante único”, dijo Torra durante la presentación del centro a la prensa. La polémica del futuro del Born apenas comienza.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.