Megasa pide a Feijóo que presione a Industria para impedir su cierre

Megasa contra su cierre. Durante dos horas, la plantilla de Megasa (190 operarios) permaneció hoy concentrada en la plaza de España, delante del edificio de la Xunta en Ferrol. Lo hicieron con el mono rojo de faena puesto para exigirle al presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, que los reciba cuando antes y que “abandere la defensa de su empresa como hizo con otras”. Lo exigieron con su presencia y también por escrito.

Se quejan amargamente de que un decreto gubernamental hecho a la medida de Alcoa para evitar la deslocalización de la compañía les está causando graves perjuicios por “competencia desleal”. El Comité, con mayoría de UGT, desplegó una pancarta con el mensaje: “La política energética del PP nos lleva al cierre”. Reclaman “igualdad sin trampas” en la tarifa eléctrica y “sin apoyo político a sus competidores”. Instan a Feijóo a que se ponga al frente de sus reclamaciones ante el Gobierno central, también del PP, para lograr un cambio en el decreto que les permita seguir produciendo y exportando en igualdad de condiciones.

“Nos tiene que buscar una solución”, reclamó Carlos Bascoy, presidente del Comité. “No pedimos limosna, pedimos trabajo. Somos competitivos y estamos saneados, no como otras empresas a las que hacen favores”, incidió. Megasa es una siderometalúrgica que lleva décadas asentada en Narón fabricando barras de hierro que son el soporte básico para levantar cualquier construcción. Sus hornos funcionaron a pleno rendimiento muchos años los 365 días sin apenas excepción. Resistieron la crisis del ladrillo -donde tienen a sus principales clientes- pero el mazazo les ha caído desde el sector eléctrico.

La modificación del reglamento energético que el Ministerio de Industria publicó el 27 de diciembre del 2012 proporciona a sus principales competidores, la catalana Celsa, una bonificación mucho más alta por el consumo eléctrico por el mismo decreto del que se beneficia Alcoa. “Pagan un 75% menos”, resume Bascoy. Esto es, la planta de Barcelona fabrica lo mismo y lo vende más barato que Megasa porque la energía que gasta para producirlo le cuesta mucho menos. En mayo, la dirección de Megasa comunicó al Comité que la planta tendrá que cerrar el 31 de agosto -final del año eléctrico- si el Gobierno central no les ofrece una solución,

Si la siderúrgica naronesa, una de las empresas más importantes de la ría, termina echando el cierre tras el verano mandará al paro a 200 personas en una comarca deprimida con un 32% de paro. Destruirá otro millar de puestos asociados entre transportistas, estibadores y distribuidores y supondría una merma muy importante al volumen de mercancía que mueve el puerto de Ferrol, por donde salen cada año 400.000 toneladas de hierro de Megasa. La plantilla se sumó el miércoles a la huelga comarcal y el próximo 25 de junio caminará desde la fábrica hasta el Ayuntamiento de Narón.