Navarro pronostica que Mas va hacia su “suicidio político” y arrastrará a Cataluña

Pere Navarro, primer secretario del Partit dels Socialistes (PSC), lamentó ayer “la falta de respuestas” del Gobierno catalán en un momento especialmente complicado y pronosticó que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, va hacia su “suicidio político”. “Vemos una gran parálisis en el Gobierno a la vez que Mas está produciendo su suicidio político y está arrastrando con él a su partido y su país”, subrayó Navarro, que criticó que Mas no destine sus energías en combatir paro.

En un acto en El Prat de Llobregat, Navarro hizo una reflexión sobre el resultado de los últimos sondeos que arrojan que Esquerra Republicana (ERC) ganaría hoy mismo las elecciones desbancando por primera vez a Convergència i Unió (CiU) como primera fuerza política. Los socialistas y los populares también sufrirían una pérdida considerable de escaños. “Hay una gran confusión en la gente, sobre todo en aquellas personas que tienen dificultades y necesitan esperanza. El Gobierno catalán”, razonó Navarro, “lo único que les ofrece son mundos ilusorios, falsas promesas y un camino que solucionará milagrosamente todos sus problemas, pero no soluciones a los problemas de hoy”.

Ante esta situación, Navarro emplazó a Mas a negociar con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, una nueva financiación para Cataluña y un nuevo modelo de Estado al tiempo que le acusó de incumplir las resoluciones del Parlament. “Lo que tenemos que pedirle es que vaya a hablar con Rajoy, que este escuche y que se pueda producir una consulta legal y acordada”, dijo Navarro, que sostuvo que “lo que no se puede hacer es engañar indefinidamente a la gente y decir que se pueden hacer cosas ilegales”.

Joana Ortega, vicepresidenta del Gobierno catalán, consideró ayer imprescindible en una entrevista en el 3/24 que el PSC e Iniciativa continúen con su compromiso con el derecho a decidir. Y se mostró partidaria de que en la consulta se registre la misma participación similar a las de las últimas elecciones autonómicas, que fue del 68%. La democristiana expresó su deseo de que el apoyo que reclama el Gobierno catalán sea suficientemente elocuente para no romper la cohesión social del país y para que nadie desvirtúe el resultado.