CC OO despide a un dirigente por apropiarse de 105.000 euros de la caja

Manejaba en la última década el dinero de las cuotas de los afiliados al sindicato CC OO en las comarcas centrales, conocía con detalle las fuentes de financiación de la organización y se había ganado la confianza de los dirigentes sindicales hasta el extremo que durante años, supuestamente, se apropió de fondos sin levantar la mínima sospecha, y sin dejar rastro.

El alcoyano Jesús Picazo, secretario de Organización y Finanzas del sindicato CC OO en las Comarcas Centrales ha sido despedido tras reconocer que se apropió indebidamente de 105.000 euros de la caja de esta central sindical, según confirmó Bernat Asensi, responsable de Comunicación y Relaciones Institucionales de la ejecutiva de CC OO en el País Valenciano.

El sindicato, además de despedirlo y apartarlo de cualquier responsabilidad a finales de marzo nada más conocer los hechos, abrió un expediente informativo y sancionador contra Picazo, que también dimitió como miembro de la ejecutiva comarcal. El exsecretario de Organización y Finanzas, cargo que ostentó durante más de 12 años, era un hombre máxima confianza del actual líder de CC OO, Paco Molina, y de la secretaria comarcal Manuela Pascual con los que se crió políticamente, ya que los tres son alcoyanos y compartieron la misma agrupación.

Cuando la dirección del sindicato tuvo conocimiento de estas irregularidades apartó “de inmediato” a Picazo de sus responsabilidades, y tramitó su despido fulminante. Una destitución que firmaron tanto Manuela Pascual como Paco Molina. “Desconocemos cómo ha podido burlar los controles internos de fiscalización del gasto y de los ingresos que determina Madrid, pero lo ha estado haciendo de manera continuada”, admitió Asensi que calcula que durante varios años, supuestamente, Picazo estuvo apropiándose de parte de las cuentas internas que manejaba en el sindicato.

El expediente informativo y sancionador, que estará listo en unas semanas, pretende determinar si el dinero que se quedaba lo obtenía de las cuotas de los afiliados, algo bastante difícil ya que la inmensa mayoría se pagan mediante domiciliación bancaria, o bien a través de otras fuentes de ingresos, como pueden lotería, subvenciones o donaciones. “La contabilidad estaba bien, cuadraba y las cuotas están reflejadas, pero desapareció dinero”, admitió Asensi.

El expediente una vez concluido también podría plantear algún tipo de sanción económica contra Picazo, que sigue siendo afiliado en esta agrupación que engloba las comarcas de L’Alcoià-Comtat y La Vall d’Albaida. Según las mismas fuentes, Picazo firmó ante notario un documente escrito en el que reconoció los hechos y se comprometió a devolver la cantidad que ha desaparecido al sindicato.