Una feria de material de obra reabre el Madrid Arena 175 días después

"Ahí fue. Ahí fue". Ha sido la frase más repetida esta mañana en el vomitorio del Madrid Arena en el que perdieron la vida cinco chicas hace 175 días en el transcurso de una macrofiesta. El pabellón municipal ha reabierto hoy sus puertas con la feria de materiales de construcción Bigmat Day, que contará con 120 expositores. El Ayuntamiento ha solucionado desperfectos menores pero no ha realizado reformas en el pabellón deportivo, a pesar de conocer desde 2010 que presenta deficiencias.

Amigos y familiares de las cinco jóvenes fallecidas se han concentrado a primera hora de la mañana a las puertas del recinto en contra de su reapertura. Con una pancarta que rezaba Siempre en nuestros corazones, los jóvenes y familiares se han quejado de que seis meses después no se han tomado medidas para que la tragedia no se vuelva a repetir.

Aquí le quitaron la vida a cinco jóvenes y nadie ha tomado medidas. ¿Quieres ser el próximo? Justicia, Madrid Arena, se puede leer en otra pancarta con la imagen de las cinco chicas fallecidas: Katia Esteban, Rocio Oña, Belén Langdon, Cristina Arce y María Teresa Alonso. Ángel Esteban, padre de Katia y exconcejal socialista, escribía esta mañana en su cuenta de Twitter: "Mi hija y los amigos de mis hijas no acosarán, ni amenazarán, ni coaccionaran a nadie. Hoy estarán en el Madrid Arena".

Los vigilantes de Seguriber custodian todos los accesos, en especial el vomitorio AP en el que se produjo la mortal avalancha en la que murieron cinco jóvenes. La gente que entraba y salía se fijaba en este acceso y en los tres tramos de escalera, con 15 peldaños cada uno, que había en los laterales de esta entrada. Otra de las zonas que también despertaba expectación ha sido la entrada de la enfermería, en un lateral del pabellón, en la planta baja.

"Si nos dejan trabajar a nosotros, seguro que no hubiera pasado nada, pero aquella noche solo trabajaba gente que no hablaba español y que ni siquiera estaba conectada por radio", se quejaba uno de los vigilantes de Seguriber.  "Nos dejaron a nosotros fuera, pese a que había miles de personas en el exterior y que no hacían más que entrar gente. Aquella noche calculamos que había lo menos 21.000 personas", ha añadido.

El recinto lucía ayer tranquilo, con una feria sectorial y profesional a lo que solo pueden entrar los socios de los organizadores. Estará abierta hasta mañana jueves y se dedica en exclusiva a la construcción.

El espacio ha permanecido vacío desde el 1 de noviembre, salvo inspecciones en el marco del proceso judicial en marcha, el rodaje de una película el pasado marzo y la visita de los evaluadores del COI a la candidatura de Madrid 2020 el día 20 de ese mismo mes. De lograr el sueño olímpico, allí se disputaría la competición de balonmano.

¿Es seguro reabrir el Madrid Arena? En una feria, la ley prevé una persona cada dos metros cuadrados, es decir, 925 personas en la pista —el recinto tiene un total de 30.000 metros cuadrados—. La última edición de esta feria contó con la asistencia de más de 5.000 personas en dos días, número que los organizadores esperan aumentar en la actual convocatoria. Las salidas de emergencia que existen serían suficientes, en caso de que sea necesario usarlas. En una fiesta, el aforo legal sería de 3.700 personas en la pista (aunque el organizador del evento de Halloween presuntamente triplicó o cuadruplicó esa cifra).

El Madrid Arena no está preparado para ese uso, tal y como señalaba un informe de 2010 del propio Ayuntamiento, desvelado por EL PAÍS. Dado que son fallos de seguridad que afectan a la propia estructura del edificio, el Ayuntamiento se ha limitado a prohibir los eventos que supongan un riesgo. Su objetivo a medio plazo es privatizar la gestión, y para eso debe ponerlo en el mercado cuanto antes. A pesar de todo, el Madrid Arena no ha estado nunca cerrado por motivos de seguridad, como sí lo han estado otros espacios gestionados también por la sociedad municipal Madrid Espacios y Congresos (Madridec) —el Palacio Municipal de Congresos, que también reabre hoy, y el Pabellón de Cristal— aunque sí estuvo tres semanas precintado judicialmente.

El Ayuntamiento de Madrid ha insistido en numerosas ocasiones en que el pabellón era y es seguro y ha achacado la tragedia al exceso de aforo propiciado por la venta de miles de entradas por encima de lo permitido. Esta misma semana, el director de operaciones de Madridec, Etienne Maricq, subrayó que el pabellón "cumple las condiciones técnicas y de seguridad para su uso". Maricq informó de que en el Madrid Arena se han invertido en los últimos meses algo más de 11.000 euros en "mantenimiento" y 62.000 en la subsanación de "deficiencias, incidencias y anomalías detectadas en las revisiones". También se han acometido reparaciones, vía seguro, de desperfectos de la fiesta —cristales, puertas y elementos de los baños rotos— por 43.947 euros.

Además del Madrid Arena, el Palacio Municipal de Congresos retoma sus actividad este miércoles con un acto, presidido por la alcaldesa de la capital, Ana Botella, con el que se conmemorará las dos décadas de vida de la instalación. El recinto, obra de Ricardo Bofill, fuero inaugurado con un Congreso Internacional de Enfermería en el año 1993.