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Una ‘traviata’ entre Edith Piaf y Maria Callas

TNT estrena en el Teatro Lope de Vega de Sevilla su versión teatral de ‘La dama de las camelias’

Margot Molina
Un ensayo de 'La dama de las camelias' en Sevilla.
Un ensayo de 'La dama de las camelias' en Sevilla.julián rojas

Todos los hombres que han pasado por su vida asisten, mudos, al trágico final de Marguerite Gautier, la cortesana que se dejó vencer por el amor. El recuerdo de sus amantes, representados por decenas de chaquetas que cuelgan de un gran andamio, es una carga de la que la protagonista de La dama de las camelias no logra escapar. Esta nueva encarnación de la prostituta de lujo que creó Alejandro Dumas en 1848 y que universalizó Giuseppe Verdi en su ópera La traviata se estrenará mañana en el Teatro Lope de Vega de Sevilla dirigida por Juana Casado, autora también de la coreografía y la escenografía del montaje.

La directora y bailarina madrileña ha moldeado a su criatura con buenos mimbres: el desgarro de las canciones de Édith Piaf y la pasión que Maria Callas le puso a su Violetta en La traviata que protagonizó en 1953 en el Teatro alla Scala de Milán. A ambas se suma la ternura que le aporta la actriz Marga Reyes, quien da vida a una dama de las camelias del sigo XX. “Es un personaje que requiere mucha energía y supone un gran desgaste emocional, pero del bueno. El montaje es muy intenso y los cuatro estamos en escena durante toda la obra”, explicaba ayer Marga Reyes, quien además baila y canta dos temas de la Piaf (Padam... Padam... y Milord).

La producción, que podrá verse en el Lope de Vega hasta el 7 de abril, es del centro de investigación teatral TNT de Sevilla, un proyecto que dirige Ricardo Iniesta, y girará después por otros escenarios españoles como el Festival de Teatro Clásicos en Alcalá (Alcalá de Henares, Madrid) o el Festival Castillo de Niebla (Niebla, Huelva).

La directora Juana Casado lleva al siglo XX la novela de Alejandro Dumas

“La obra es el resultado de un trabajo en común. María Cabrera [autora de la versión] escribía a partir de las propuestas que yo le iba haciendo. Es una fórmula que nos fue muy bien en Despertamos, la obra que hicimos juntas el año pasado para el proyecto europeo Caravan”, comentaba ayer después de un ensayo Juana Casado, quien en 2012 recibió tres Giraldillos, los premios que concede la Bienal de Flamenco de Sevilla, por su montaje Aleluya erótica.

“Hemos sintetizado a todos los personajes secundarios en dos: Prudence, una mezcla de su vecina y sus amigas cortesanas, y Duque, quien representa al viejo benefactor de Marguerite y a sus ricos amantes y amigos. Lo más complejo ha sido actualizar el lenguaje”, comenta la dramaturga María Cabrera. “El grueso del trabajo es muy emocional y muy físico, de forma que con esa intensidad tan alta nos hemos tenido que contener para no caer en el melodrama”, asegura David Montero, quien da vida al enamorado Armand Duval.

Joaquín Galán, un histórico de Atalaya —la compañía de Ricardo Iniesta—, reconoce que le ha supuesto un esfuerzo ceñirse a la contención que persigue la directora para encarnar a Duque. “Creo que mi personaje, a pesar de su tono chulesco y de que representa a todos los amantes, siente algo especial por Marguerite aunque le cuesta reconocerlo”, explica.

Frente al romanticismo que envuelve a la dama de las camelias, Beatriz Ortega da vida a Prudence, una prostituta ambiciosa y descarada dispuesta a ocupar el vacío que Marguerite deja tras su muerte. Manolo Cortes, quien se encarga de la caracterización en el montaje, dibuja a la perfección a los dos personajes femeninos en este retrato atemporal que Juana Casado hace de la prostitución. Un mercado regido por estrictas leyes no escritas que devora a quienes se atreven a transgredirlas.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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