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El carril bus-VAO duplica el paso de vehículos tras relajar su reglamento

El director de Tráfico califica de "óptimo" el tráfico alcanzado durantre la jornada de hoy El aumento de tráfico no rompe con la imagen de infraestructura casi vacía

Dani Cordero
Imagen de hoy del carril Bus-VAO.
Imagen de hoy del carril Bus-VAO.Massimiliano Minocri

A la vista de cualquier ciudadano, el carril bus-VAO de la C-58 ha continuado hoy yendo vacío. Pero en opinión del director general del Servicio Catalán de Tráfico (SCT) , Joan Josep Isern, la infraestructura ha logrado su nivel "óptimo". Ese podría ser el resumen, las dos caras, de la primera jornada del bus-VAO con un reglamento de uso mucho más laxo, con el que se pretende normalizar un carril que, en sus tres primeros meses de visa, vivía sumido en el fracaso, con menos de 2.000 vehículos utilizándolo cada día.

Hoy, solo entre las 6.30 y las 13.00, se ha superado con creces esa cifra, que se ha situado en 2.387 vehículos, un 106% más que el promedio del mes de febrero. Entre las 13.00 y las 16.00, una franja horaria en la que hasta ahora se mantenía cerrado el carril, han pasado 521. Y ya por la tarde, hasta las seis de la tarde (último dato facilitado por el SCT), se habían contabilizado otros 541, cuando el lunes pasado solo habían pasado 191 hasta las ocho de la noche.

Esas estadísticas, según ha explicado Isern, suponen que el bus-VAO ha absorbido entre el 6% y el 7% del tráfico de la C-58 en la entrada de Barcelona, las previsiones con las que jugaba el SCT cuando se diseñó la infraestructura, en tiempos de Joaquim Nadal (PSC) como consejero de Política Territorial. "No ha de haber sobreexplotación y respetar la utilización óptima supone no poder superar ese 7%", ha señalado Isern.

Los cambios estrenados hoy por el SCT son básicamente dos: que puedan circular aquellos vehículos con un mínimo de dos personas (antes ese mínimo era de tres) y que el sentido de marcha siempre será el de entrada a Barcelona (antes era de entrada a Barcelona por la mañana y de salida por la tarde).

Isern ha destacado también la importancia de haber fijado un único sentido de marcha, por lo que supone poner fin a una situación de "agravio". "No entiendo cómo es que nadie se había dado cuenta de que [con la configuración anterior] el carril solo beneficiaba a las personas de fuera de Barcelona", ha criticado Isern, quien ha rechazado que el carril no deba acusar más cambios en el futuro. "La mejora que se tendría que hacer es la de la mejora del transporte público", ha sentenciado. Incluso, si hay concienciación, volver a las condiciones anteriores: vehículos con más personas.

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Sobre la firma

Dani Cordero
Es integrante de la redacción de EL PAÍS en Barcelona, donde ha desempeñado diferentes roles durante más de diez años. Licenciado en Periodismo por la Universidad Ramon Llull, ha cursado el programa de desarrollo directivo del IESE y ha pasado por las redacciones de 'Ara', 'Público', 'El Mundo' y 'Expansión'. 

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