El TSJA pide a Alaya que acelere la instrucción de las grandes causas

El Tribunal Superior de Justicia (TSJA) ha pedido a la juez del caso de los ERE fraudulentos, Mercedes Alaya, que acelere la instrucción de las grandes causas que investiga. El alto tribunal andaluz reconoce “la complejidad” de las investigaciones que dirige y la “extraordinaria dedicación” de la juez al trabajo, pero le pide que reduzca los retrasos procesales. Alaya acaba de incorporarse al juzgado tras una baja por enfermedad de seis meses y dada la complejidad de la causa, la instrucción ha sufrido un serio parón. “Expresar (…) la importancia de que no se dilate la instrucción de las causas que tiene asignadas (…) con el fin de que el proceso penal se ajuste a pautas temporales razonables y asegurar que la acción de la justicia cumpla su función constitucional con la máxima eficacia”, ha subrayado el TSJA en un comunicado.

La causa que analiza la anterior gestión del Betis se inició hace cinco años y la de la venta de suelos en Mercasevilla en 2010. La tercera causa por delito societario en la empresa pública sevillana no ha tenido aún declaraciones de los exdirectivos acusados, pese a que su imputación se les notificó en mayo de 2010. Por último, la investigación de los ERE durará aún varios años y ninguna de las partes que lideran la investigación divisa un final, dado que esta se topa con indicios de nuevos delitos cada cierto tiempo. Ante esta situación de las causas, los recursos y quejas de los abogados por las dilaciones indebidas son continuos. Estos retrasos podrían afectar a la ulterior condena de los más de 80 imputados que acumulan las causas, dado que afecta a su derecho a la defensa.

La Sala de Gobierno del TSJA ha confirmado que Alaya, como “juez natural y predeterminada” contará desde ahora con un juez de apoyo, a pesar de que el alto tribunal había designado dos magistrados para acabar con los retrasos del juzgado y el presidente del órgano, Lorenzo del Río, había apostado por los refuerzos e intentó mediar sin éxito. Del Río intentó solventar las diferencias entre los tres jueces, Alaya, Ana Rosa Curra y Rogelio Reyes, para que trabajaran los tres codo con codo. Pero fracasó en su propósito.

Entre algunos miembros de la Sala de Gobierno existían dudas jurídicas para primar la igualdad de jurisdicción y ordenar un reparto de casos ecuánime entre los tres jueces. Pero dado que tras la propuesta de Alaya de contar con un solo juez de refuerzo, ni Curra ni Reyes presentaron una propuesta alternativa, las dudas se disiparon y el TSJA no tuvo más opción que aprobar la tesis de Alaya.

Ahora el presidente del TSJA decidirá en los próximos días quién de los dos jueces permanece en el juzgado los próximos seis meses para resolver “los asuntos ordinarios” y colaborar con Alaya, tal y como esta había pedido el día anterior al alto tribunal. Reyes cuenta con más opciones de permanecer en el Juzgado 6 de Instrucción, dado que las diferencias entre Curra y Alaya son notorias, sentencian fuentes judiciales.

Alaya deberá informar a la Sala de Gobierno dentro de dos meses sobre el refuerzo y la capacidad para reducir el atasco y conocer “su efectividad”. “Y si es bastante a los fines de la normalización perseguida” en el juzgado, y en caso contrario, proponer otras medidas al Consejo General del Poder Judicial.