Un barullo organizado

Se cubre las espaldas la directora de escena Marina Bollaín anteponiendo desde el título del espectáculo la expresión Noche de verano a su adaptación sobre La verbena de La Paloma. No es la suya una lectura al pie de la letra de la popular zarzuela de Tomás Bretón sino una recreación, en clave moderna, de la misma, con añadidos verbeneros de nuestro tiempo como una rumba, un bolero o el bailable Waka Waka, en alternancia con las seguidillas tradicionales Por ser la Virgen de La Paloma. Al público se le obsequia con sangría y en algunas representaciones incluso reacciona cantando y bailando en la sala. Se busca y se consigue, un espíritu festivo, colorista, con cierto toque kitsch. Un documental breve sobre el Madrid actual y algunos de sus festejos se intercala a modo de definición de unas coordenadas entre realistas y, por momentos, un poco esperpénticas. El espectáculo es desenfadado, abusa en ocasiones del tópico y destila una intencionalidad popular por los cuatro costados.

Las romanzas, coros y dúos de la zarzuela conviven con la emotiva Dos gardenias, pongamos por caso. Y en ese barullo organizado se mueven a sus anchas los cantantes, en registros teatrales para ellos no habituales. En conjunto es un espectáculo diferente y hasta osado, que despierta simpatía pero no entusiasmo. Tiene frescura y atrevimiento pero se echa de menos continuidad, incisividad y un puntito de picardía. Es lo que es, en cualquier caso: algo diferente e imaginativo. La orquesta de la Comunidad de Madrid cumplió y de las voces destacó la homogeneidad del reparto más que las individualidades. Atinada asimismo, en todo momento, la bailaora Olga Castro. La facilidad de adaptación a los avatares del paso del tiempo de La verbena de La Paloma queda de manifiesto en todo momento. Es un mérito más a añadir a la singular y atrevida propuesta de Marina Bollaín.

NOCHE VERANO EN LA VERBENA DE LA PALOMA. Adaptación y dirección de escena: Marina Bollain. Con Cesar San Martín, Amparo Navarro, María José Suarez, David Rubiera, Emilio Sánchez, Itxaro Mentxaka y Juanma Cifuentes, entre otros. Teatros del Canal. Hasta el 3 de marzo