Asaltadas otras dos viviendas en Girona en menos de 24 horas

El drama de los asaltos a viviendas ha vuelto este fin de semana con fuerza en la provincia de Girona. Unos desconocidos asaltaron a mediodía de ayer una masía situada en Pontós (Alt Empordà) y robaron entre 400 y 500 euros a los inquilinos de la misma, un hombre de 93 años en silla de ruedas y su cuidadora, informaron fuentes policiales. El viernes por la noche unos ladrones asaltaron una masía de Campdorà (Gironès) y, después de intimidar a la inquilina, de 65 años de edad, se llevaron joyas y dinero, y la dejaron atada a la cama.

Los asaltantes de Pontós abordaron a la cuidadora del anciano cuando ésta regresaba de realizar unas compras en un supermercado de una localidad vecina y la obligaron a entrar en la masía, denominada Can Joanola, utilizando sus propias llaves.

Una vez en el interior de la masía, los asaltantes ataron a la cuidadora a un armario con unas cuerdas y taparon los ojos al anciano con una tela. Los asaltantes registraron después de la vivienda y se apoderaron de entre 400 y 500 euros en efectivo antes de huir, según las fuentes.

El otro caso ocurrió la noche del viernes en la masía Can Mingo de Campdorà. Los ladrones la intimidaron para que les abriera la caja fuerte y les diera el dinero que había en su interior, cuyo montante por el momento no ha trascendido, y también para que les diera las joyas, y después la ataron a la cama.

Una vez se fueron con el botín, la víctima tardó horas en conseguir desatarse y fue pasada la medianoche cuando consiguió llamar a emergencias para avisar de lo que le había sucedido.

Inmediatamente, varias patrullas de Mossos d’Esquadra se presentaron en el lugar y también una ambulancia del Servicio de Emergencias Médicas (SEM), ya que la víctima tuvo que ser atendida tras sufrir un ataque de nervios.

Al recibir la alerta por este asalto violento, el séptimo en lo que va de año en la provincia de Girona, los Mossos activaron el cierre comarcal de carreteras para intentar localizar a los asaltantes, aunque sin resultado positivo.

Agentes del Área de Investigación Criminal de Girona iniciaron la investigación con la inspección ocular de la masía y han recogido indicios y muestras para tratar de identificar a los autores del asalto.

La oleada de robos violentos en viviendas ha puesto en máxima alerta al Departamento de Interior. La Generalitat ha ampliado a todo el territorio catalán el operativo especial para prevenir e investigar los asaltos que se puso en marcha en Girona tras el asesinato del empresario Jordi Comas en su casa de Platja d’Aro (Baix Empordà), en noviembre.

Interior ya no considera que el problema solo concierne a Girona, la región policial donde hasta ahora se habían concentrado los esfuerzos. Los robos con violencia aumentaron en esta provincia un 86% el año pasado: si en 2011 fueron 29, en 2012 la cifra alcanzó los 56. Los asaltos también aumentaron en Cataluña, aunque menos: de los 532 que se produjeron en 2011 se pasó a 567 en 2012, lo que supone un crecimiento del 6,6% y una media de 1,5 robos diarios.