Baltar coloca como asesor a un enchufado de su padre con 80.000 euros de sueldo

Llevar a una empresa pública a la quiebra, en la Diputación de Ourense tiene premio. En concreto, un contrato de asesor por 64.000 euros anuales. José Cudeiro, el exgerente de la ruinosa empresa urbanística creada en 2008 por Baltar padre, acaba de ser contratado por Baltar hijo como asesor técnico en la máxima categoría profesional. Los consejos que dará al presidente ourensano costarán anualmente más de 80.000 euros a las arcas públicas. Con este enchufe, el organismo evita abonar al exgerente una indemnización de 220.000 euros tal y como estipulaba el acuerdo avalado por el exbarón. El BNG considera que de esta forma “se evita el ridículo social” al tener que asumir la cláusula estipulada en su contrato.

Cuando fue colocado a dedo por el exbarón, Cudeiro blindó su contrato con esa abultada cantidad en caso de ser despedido. Incluso si el abandonaba el puesto de motu proprio, percibiría 110.000 euros como recompensa por gestionar una empresa pública que en tres años perdió más de 381.000 euros. Pero el vástago del clan Baltar contrata a pares. El mismo día que colocó a dedo a Cudeiro, el pasado 23 de enero, también formalizó la contratación como “asesor de política cultural” del portavoz y edil del PP en Ribadavia, César Fernández. Cobrará 26.000 euros como especialista en cultura.

No son los únicos asesores que aconsejan al nuevo líder ourensano. Desde que heredó el despacho presidencial, también ha contratado a Bernardino González, concejal del PP en el Ayuntamiento de Ourense, como asesor deportivo. Y además mantiene en nómina a otro asesor en materia de comunicación. Ambos puestos cuestan a las arcas públicas más de 95.000 euros al año. En 2013 y en medio del ERE que afecta a 32 empleados del organismo, el gasto en asesores superará ampliamente los 200.000 euros. Baltar hijo quiere ahorrar 800.000 euros echando a esa treintena de empleados laborales indefinidos. Pero al mismo tiempo que presume de ahorro, la partida de gasto en personal de confianza aumenta considerablemente.

Hoy se producirá la última reunión negociadora entre los representantes de los trabajadores y la Diputación. Los empleados han rechazado la última propuesta, que elevó la indemnización a 25 días por año trabajado y un máximo de 18 mensualidades. Baltar insiste en que formalizará los despidos pase lo que pase. Recalca que “cuando se presenta el expediente, se presenta con la finalidad de llevarlo a cabo”.