La pasarela 080 se celebrará en verano en el Hospital de Sant Pau

Todavía no ha finalizado esta edición del 080 Barcelona Fashion, pero la maquinaria de la siguiente ya está en marcha. El recinto histórico del Hospital Sant Pau de Barcelona será el escenario de la edición del mes de julio. De momento, ayer pisaron la nueva pasarela del DHUB marcas como TCN, Desigual y diseñadores como Josep Abril. Hoy arranca la jornada la joven Katarina Grey y cierra Custo Barcelona.

Todas son empresas de moda; unas marcas comerciales y otras regidas por diseñadores independientes, pero todas van estos días de la mano en el cajón de sastre del sector textil en Cataluña, la 080 Barcelona Fashion. La heredera de la Pasarela Gaudí ha puesto en marcha, por tercera vez en sus 11 ediciones de vida, una fórmula mixta de desfile donde las grandes marcas de masas conviven con diseñadores de otras dimensiones.

Atrás quedan los inicios de la 080 Barcelona Fashion como plataforma para dar visibilidad a las pequeñas empresas más independientes. “Yo veo mucho mejor el mundo unido de los diseñadores emergentes, las marcas e, incluso, la industria. Todo lo que sea unir fuerzas es positivo y el éxito de la 080 es un ejemplo de ello”, declara el director general de Desigual, Manel Jadraque.

Diseñadores y marcas coinciden en que la fórmula mixta conviene a ambas partes en estos momentos de crisis. A unos les beneficia el impulso mediático de las empresas comerciales y los otros necesitan un escaparate para aumentar su proyección. El modisto Manuel Bolaño, que presentó este martes su colección de otoño-invierno inspirada en los días tristes y helados del invierno, caracteriza el cambio de tendencia de la 080 como “una evolución, igual que los diseñadores evolucionan cuando crecen”. El diseñador explica que no comparten el mismo tipo de público y la 080 supone un beneficio mutuo para ambos: “Aunque ellos pueden atraer más gente, nosotros mostramos cosas que ellos no pueden”, sentencia. También la diseñadora Celia Vela, que trabaja con sus colecciones en países como Japón, asegura que “es un buen momento para unir fuerzas” y, aunque entiende que resulte rara la convivencia entre diseñadores independientes y grandes empresas, “mediáticamente las marcas tienen mucho más tirón y cualquier convocatoria que hacen consiguen reunir a mucha gente”, apunta.

Por otra parte, modistos habituales en la 080 como Josep Abril, que no se presentó en la última edición de verano en 2012, han mostrado su apoyo a la propuesta pero con matices: “Las grandes marcas pueden atraer más público pero tendrían que estar más separadas para que se diferenciara bien qué es producto y qué es ropa de creación. La gente puede confundirse y eso no es bueno”, alega el diseñador que ayer presentó su última colección en la que desfiló el modelo Jon Kortajarena.

Este año la 080 Barcelona Fashion cuenta con un presupuesto un 4,5% mayor que en la edición pasada gracias a la participación de nuevos patrocinadores, la aportación de la Generalitat para las dos ediciones de este año es de 1.100.000 de euros. El certamen textil también ha notado una crisis en el sector que diseñadores como Celia Vela opta por combatir a base de “optimismo e imaginación”.