De regalo, un concierto

Contener la excitación de los niños ante la próxima llegada de los Reyes Magos no es tarea fácil, pero dicen que la música amansa a las fieras. Debe de ser por eso que este fin de semana hay varios conciertos infantiles en diversos puntos de Madrid. Forman parte de una reciente corriente de música para niños que —muy importante— también pueden disfrutar sus padres: “Los padres de ahora no son los de hace 40 años”, dice Daniel Marín, dueño del bar-restaurante Costello Río, lugar que habitualmente programa este tipo de actuaciones y donde el sábado actuarán Coffee & Wine: “Hay gente más moderna (o underground, llámala como quieras), que tiene niños y ya no puede salir tanto por las noches”, continúa Marín, “así que agradecen poder ver un concierto de día con sus hijos”.

Alondra Bentley, que estará hoy en Matadero, no es madre, pero está acostumbrada a tratar con niños en su trabajo como profesora de inglés para “casi bebés de entre 18 meses y cuatro años”. Por eso opina que “era inevitable” que acabara grabando un álbum dirigido específicamente a ellos, como el que editó el pasado verano bajo el título Alondra Bentley sings for children, it's holidays! “Musicalmente, es casi como los otros discos que he grabado, lo diferente son los temas de los que hablo y cómo lo hago”, explica la cantautora hispano-británica. Así, entre chispeantes canciones sobre animalitos o fiestas de cumpleaños, también hay hueco para ambientes melancólicos: “Es que yo recuerdo que de pequeña también sentía melancolía, no todo era fiesta y locura, y el oído de los niños está listo para escuchar cualquier cosa. Es muy agradecido escribir para ellos: descubren muchas cosas por primera vez y todo les parece fascinante”. Además de las clases y los conciertos, Bentley hace de cuentacuentos todas las semanas en la tienda Baby Nest (a partir de febrero, en el Creativity Club de Arturo Soria), por lo que actuaciones como la de Matadero incluyen cuentos y juegos, “con el objetivo de que los niños participen, que se suban al escenario a tocar algún instrumento, por ejemplo”.

Público exigente

Ana Franco también canta folk en inglés, con el alias de Coffee & Wine, pero no tiene tanto callo con el público bajito: “Me da un poco de miedo, porque dicen que los niños son muy sinceros y si no les gusta se van”, confiesa entre risas. ¿Cómo se prepara un concierto así? “Pues metiendo instrumentos no tan habituales como el ukelele, la melódica o el glockenspiel, para enseñarles cómo funcionan. En cuanto al repertorio, seleccionamos los temas más animadillos del disco [Fresh from the ground, su debut] y hemos preparado alguna versión, como Happy Xmas (War is over), de John Lennon, o una adaptación al castellano de Rudolph the red-nosed reindeer”.

Además de conciertos más o menos al uso, también hay en la cartelera espectáculos infantiles más teatrales. Es el caso de Los Rockids, un montaje que se representa todos los fines de semana en el Lara y que cuenta con un sencillo argumento: el malvado villano que odia la música moderna y quiere acabar con ella. A través de esa trama, suenan en directo una docena de canciones muy conocidas de artistas como los Clash, Tequila o los Rolling Stones, temas con los que se busca enganchar a los padres: “Es música de su generación, de los 70, 80 y 90, para que ellos tampoco se aburran”, cuenta Enrique Linera, su creador, que anteriormente ideó otros musicales parecidos, pero con el flamenco como elemento central. “La reacción de los chavales al rock es mucho más enérgica”, señala Linera: “Tratamos de acentuar la faceta más gamberrilla del rock y ellos responden bailando desatados”.

Al margen del rock, el folk o el pop, este fin de semana de Reyes ofrece otras músicas para melómanos diminutos. En el auditorio de Conde Duque, el Coro Talía y la Orquesta Metropolitana interpretarán estándares de swing y jazz, mientras que Patricia Arbolí y Mónica Sánchez tocarán el piano —y dejarán que lo toquen, manoseen y disfruten bebés de entre 0 y 18 meses— en el patio de La Casa Encendida, como parte de su proyecto Pía-Pía, Piano.