El Colegio de Abogados desestima las “irregularidades” en las elecciones

Cinco días. Ese es el tiempo que ha necesitado el Colegio de Abogados de Madrid en difundir el acta alcanzada por la comisión electoral, en la que proclamaba como nueva decana a la candidata Sonia Gumpert. El acuerdo, que se filtró la mañana del pasado domingo, desestima una a una todas las alegaciones presentadas por sus opositores, que pretendían la anulación de los resultados obtenidos por la aspirante. Esta arrasó a sus oponentes, al lograr 6.426 votos frente a los 3.293 de su inmediato seguidor, el decano cesante Antonio Hernández-Gil, o frente al tercero, Francisco Javier Cremades (2.769).

La resolución, que consta de 20 folios, reconoce que sí hubo irregularidades en el proceso electoral, en especial durante el día de las elecciones el pasado 18 de diciembre. La comisión, formada por cinco letrados, ha destacado la no revelación de un pacto entre la candidata Sonia Gumpert y la Asociación de Letrados por un Turno de Oficio Digno (Altodo), la participación en el colegio electoral de colaboradores y voluntarios sin informar previamente a la propia comisión, la utilización "sistemática y organizada de los datos personales de votación" para cotejarlos con los ficheros de datos de supuestos simpatizantes que tenían en voto presuntamente comprometido y la realización de llamadas telefónicas a los colegiados que habían comprometía su voto.

Pese a tener comprobadas estas irregularidades, la comisión desestima las peticiones de los oponentes ya que no influyeron en el resultado electoral: "Nuestra conclusión es que no afectaron al resultado electoral: incluso si es posible afirmar que la jornada electoral se llevó a cabo en parte de forma indecorosa, nada nos autoriza a introducir criterios subjetivos de esta naturaleza para invalidar unas elecciones válidamente celebradas". "Ninguna de las irregularidades detectadas nos permite afirmar que el resultado electoral hubiese sido diferente", concluyen los cinco letrados, que destacan que han aplicado los principios de relevancia y proporcionalidad.

Por ello, proclama como vencedora a la candidata Sonia Gumpert y a toda su candidatura. El vicedecano será el presidente de Altodo, Manuel Valero Yáñez, y el número tres, el exfiscal de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo. La resolución puede ser recurrida todavía en vía administrativa ante el Consejo de Colegios de la Comunidad de Madrid. A partir de ahí, se abre la vía contencioso-administrativa ante los tribunales.

La comisión electoral reconoce que se ha enfrentado al proceso electoral "más complejo, disputado y discutido" de los celebrados en los más de 400 años de historia del ICAM. De hecho, la policía tuvo que intervenir la noche del martes 18 de diciembre, en el colegio electoral, en el Palacio de Congresos del paseo de la Castellana. Un grupo de letrados quiso retener a dos empleados de la candidatura de Sonia Gumpert que se llevaban los ordenadores portátiles con los que cotejaban los datos de las distintas mesas. Se produjeron entonces insultos, amenazas e incluso golpes.

"La Comisión Electoral considera que estos hechos son lamentables e injustificados. En concreto consideramos que la pugna electoral no justifica en ningún caso que se ejerza violencia verbal o física sobre las personas incluso para evitar, como en este caso, que supuestas evidencias de una conducta irregular sean extraídas del colegio electoral", recoge el acta. Los integrantes de la comisión mantienen, eso sí, que su decisión la han tomado "desde la mayor serenidad, imparcialidad e independencia de juicio".

Los cinco integrantes de la comisión también mantienen en su fallo que la regulación electoral del ICAM es "extraordinariamente parca, limitada e insuficiente", ya que los actuales estatutos no regulan de forma pormenorizada y al detalle cada una de las fases de los comicios. Por ello, aconsejan su reforma para evitar, como ha ocurrido en esta ocasión, que se utilice la Ley Orgánica de Régimen Electoral General (LOREG) como norma subsidiaria.