Ence busca cómo camuflar su impacto paisajístico

Ence no muestra ninguna intención de moverse de la ría de Pontevedra por mucho que los partidos, incluido el PP, se lo hayan prometido a los vecinos. La pastera ha convocado un concurso de ideas para integrar sus instalaciones en el paisaje costero de Lourizán, en donde se ubicó la fábrica en plena dictadura franquista pese al destrozo ambiental que provocó en uno de los bancos marisqueros más fecundos de Galicia.

El proceso se enmarca dentro del denominado Programa de Adecuación Visual, anunciado en el primer semestre de este año. El director de la fábrica, Antonio Casal, defiende que es momento de “mejorar su integración visual y paisajística”, pasando “de tener una fábrica con una estética industrial” a un diseño que resalte los valores paisajísticos de la zona donde se encuentra.

El concurso se resolverá el próximo julio, cuando se elija un proyecto vencedor, un segundo premio y tres accésits. El autor o autores del proyecto ganador recibirán 40.000 euros y será utilizado por Ence siempre que lo considere posible y “se reúnan además los necesarios requisitos administrativos”, en referencia a la necesidad de que el Gobierno central le renueve la concesión para ocupar el dominio público. La nueva Ley de Costas que prepara el Ejecutivo de Rajoy permitirá a factorías a pie de costa como la de Ence renovar el permiso si cuentan con el visto bueno de la Xunta.