El nuevo Impuesto de Patrimonio alavés afectará a igual número de contribuyentes

Álava ha presentado en la mañana del martes el proyecto para el nuevo impuesto de patrimonio de la provincia, que, de ser ratificado por el resto de partidos en las Juntas Generales, estará en vigor durante los dos próximos años, con la previsión de recaudar en torno a 15 millones de euros entre 1.500 contribuyentes alaveses, prácticamente los mismos que con el impuesto vigente en la actualidad, según explican fuentes del ente foral.

El diputado general, Javier de Andrés, ha detallado tras el Consejo de Diputados semanal el nuevo proyecto, que mantiene las mismas exenciones y la misma tarifa que en 2011 y 2012. Álava ha optado por pasar el denominado escudo fiscal del 60% al 65%, al igual que ha hecho Bizkaia, mientras que Gipuzkoa ha optado por eliminarlo. Este escudo sirve para evitar que los contribuyentes tengan que destinar toda su renta o buena parte de ella al pago de estos tributos. El proyecto de impuesto de Patrimonio alavés sigue la línea de Bizkaia y mantiene el escudo, aunque este pasa del 60% actual al 65%. Cuando se superen los límites establecidos, se reducirá la cuota de Patrimonio para llegar a los límites establecidos, aunque la reducción no podrá superar el 75% con el nuevo proyecto –mientras que en 2011 y 2012 el porcentaje era del 80%-.

De Andrés ha reconocido que su impuesto incorpora “algunas” de las ideas del impuesto vizcaíno, pero ha resaltado que existen dos diferencias: la primera, que el proyecto de Patrimonio en Álava es para los próximos dos años prorrogables, mientras que en Bizkaia se propone una “habilitación indefinida” del impuesto. La segunda, que a la hora de valorar los inmuebles, Álava únicamente tendrá en cuenta el catastro por tenerlo actualizado, algo que no ocurre en la provincia vecina, que deberá emplear más indicadores para determinar su valor. De Andrés ha señalado que se mantiene la exención por vivienda habitual en 400.000 euros y también el límite exento en 800.000 euros.

“Progresista es el que permite que la gente pueda llevar a cabo su actividad y que no se le castigue por ello”, ha respondido el diputado general, que ha calificado su propuesta como “más amable y legal” que la de Gipuzkoa porque, a su juicio, la eliminación por parte de Bildu del escudo no garantiza que se mantenga una parte de los ingresos.

Eleva de cuatro a cinco años el plazo de prescripción de las deudas tributarias

Asimismo, la Diputación de Álava ha elevado de cuatro a cinco años el plazo de prescripción de las deudas tributarias, la “única [administración de toda España] que dispone de cinco años de imprescriptibilidad”, ha valorado el diputado general, lo que permitirá “poder investigar durante más tiempo” a los contribuyentes. “No queremos ser la administración que más cobra, sino la que mejor cobra”, ha resaltado De Andrés.