Un festival de cine austero y sin premio honorífico después de 37 años

El Festival de Cine Iberoamericano de Huelva inauguró este domingo la edición más austera de su historia. La muestra, la más antigua en su especialidad en Europa, afronta su trigésimo octava edición con la mitad del presupuesto, que este año es de 418.700 euros. La falta de recursos deja, por primera vez, al certamen sin el premio honorífico Ciudad de Huelva, un emblema del festival que reconocía la trayectoria cinematográfica de una persona o de una institución. El pasado año los galardonados fueron la Academia de las Artes y de las Ciencias Cinematográficas de España y el presidente y productor de Filmax, Julio Fernández. En otros años se ha reconocido a actrices como Maribel Verdú y a actores como el desaparecido Juan Luis Galiardo.

Se ha recortado un día del certamen y se ha suprimido la gala de apertura, que tradicionalmente se celebraba el sábado. La muestra arrancó este domingo en el Gran Teatro de Huelva con la proyección de la película del director mexicano Enrique Rivero titulada Mai morire, una cinta de corte intimista en la que la protagonista destaca por la fuerza y la sensibilidad con la que afronta la muerte de su madre.

La muestra contará con 69 producciones cinematográficas procedentes de diez nacionalidades, de las que una decena de ellas competirán en la sección oficial a concurso por el Colón de Oro, que es el máximo galardón. Las diez que compiten proceden de Argentina, Colombia, Portugal y Chile. Solo en la coproducción Infancia clandestina participa España. Siete de ellas son óperas primas, una característica que se ha convertido en una seña de identidad del festival desde que Eduardo Trías es su director: “Además de presentar el panorama de la cinematografía que se está haciendo en Latinoamérica, también está sirviendo de plataforma para los jóvenes creadores iberoamericanos con una selección en la que tratamos de apoyar y poner en valor las óperas primas”. Trías subrayó que la esencia del festival es trazar “un puente natural entre la cinematografía iberoamericana y la europea”.

El jurado oficial está conformado por el director Gerardo Olivares, el periodista y escritor Fernando Lara y la actriz Irene Visedo, el productor y director Luis Miñarro y el director teatral y guionista Marcelo Vernengo. Y los encargados de elegir el cortometraje ganador entre los 17 que competirán en la sección oficial son el periodista y cineasta Antonio Llorens, la actriz Maica Barroso y el director Mario de la Torre.

El certamen acoge también algunas secciones que se han salvado del recorte como Panorama andaluz y la de cine infantil y juvenil, además de otras dedicadas al flamenco, a las mujeres o al medio ambiente. Eduardo Trías reconoció el esfuerzo de organizar una muestra con pocos recursos, pero se sintió orgulloso porque la falta de recursos no ha mermado el espíritu del festival: “Debemos sentirnos contentos de poder organizar un año más este certamen que es tan importante, teniendo en cuenta las circunstancias difíciles que atravesamos”.

El festival salva igualmente la 31ª edición del Foro de Coproducción, un encuentro profesional en el que 31 creadores y medio centenar de productores estudiarán posibles alianzas que den luz a proyectos cinematográficos susceptibles de coproducción. En la mesa de este foro a lo largo de su historia se han alumbrado más de 150 obras.