Un colegio se queda sin dirección por favoritismo con un alumno

El claustro del colegio A Rabadeira de Oleiros decidió la tarde de ayer no presentar propuesta alguna para formar equipo directivo, manteniendo así su protesta ante lo que consideran un caso de favoritismo, que llevó a dimitir la pasada semana tanto al anterior equipo como al consejo escolar en conjunto. La razón de esta medida es la decisión de la Xunta de conceder una plaza en el comedor del centro a un alumno hijo de altos funcionarios de la Administración que no la había obtenido por inscribirse fuera de plazo.

El CEIP A Rabadeira tiene adjudicadas 325 plazas. En este curso, quedaron sin ella 31 alumnos. 18 que la presentaron (sus padres) dentro de plazo y quedaron en lista de espera y otros 13 cuyos padres se despistaron. Entre ellos estaban la secretaria general técnica de la Consellería de Traballo e Benestar y el jefe de la asesoría jurídica de la Seguridad Social de A Coruña, que la entregaron cuatro días después. Los padres argumentaron la brevedad del plazo y que ya “había manifestado su intención inequívoca de usar el servicio de comedor al solicitar el transporte”, que utilizaba desde hacía cuatro años.

Una plaza más

 El jefe territorial de e Educación decidió el pasado 19 de septiembre estimar el recurso y aumentar las plazas a 326 y adjudicar la nueva al hijo de los altos cargos, a pesar de que no era precisamente el primero en la lista de espera. Lo hizo, según informó la consellería, porque fue el único recurso administrativo presentado. “Si el colegio hubiese cursado otras solicitudes, habría sido consideradas, como en el resto de centros de Galicia, de acuerdo con la normativa. Cabe señalar, además, que este alumno es usuario legítimo de transporte escolar, y lleva varios cursos utilizando también el comedor”. El niño fue dado de alta en el comedor el pasado día 6, y el jueves día 8, formalizaron su dimisión el equipo directivo del colegio y el consejo escolar.

La mañana de ayer, la inspección de Educación comunicó a la dirección del CEIP que había aceptado tanto su dimisión como la del consejo, el organismo en el que están representados profesores, padres, ayuntamiento y personal no docente. En el claustro celebrado por la tarde, los profesores tomaron conocimiento de la decisión de la Consellería y decidieron no presentar ninguna propuesta de nueva dirección.