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Gallardón reclama el espíritu de la transición y reivindica la Constitución

El ministro afirma que la independencia de Cataluña sería “un castigo económico irreversible para toda una generación”

El ministro de Justícia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha reivindicado esta tarde en El Prat de Llobregat (Baix Lobregat) el espíritu de la transición de "hablar, acordar y renunciar" frente al órdago independentista de Artur Mas. Ante más de 150 personas, el dirigente del PP ha arremetido contra los que dicen que "la transición no sirvió para nada" y ha reclamado a los presentes que voten el día 25 de noviembre "pensando en sus hijos y sus nietos".

Para Gallardón, "salir de España es salir del euro y de Europa", por lo que ha censurado a los que plantean "ideas decimonónicas" de romper con las fronteras "porque nuestros competidores no son los de al lado, sino que están en la otra punta del mundo". En otro momento, el ministro de Justicia ha recordado que nueve de cada diez catalanes votaron la Constitución de 1978, una proporción superior a la del resto de España.

"Lo que no se puede decir ahora es que ese modelo ha fracasado porque no es verdad", ha advertido. En su opinión, "lo que ha fracasado es el Gobierno de CiU por no enfrentarse con la realidad y plantear una ruptura que va contra la historia". Por eso, recriminó a CiU que ahora reclame "un cheque en blanco" a los electores para llevar a cabo su plan secesionista, una iniciativa que calificó de "idea mesiánica".

Antes de concluir la jornada en El Prat,  hizo su primera parada en Vilanova i la Geltrú (Garraf, Barcelona), donde ha hablado de la situación política que vive Cataluña ante la nueva cita electoral. Y lo ha hecho con un discurso moderado que también ha incluido algunos elogios para el territorio catalán. “España tiene mucho que agradecer a Cataluña y a su espíritu emprendedor”, ha apuntado el ministro, recordando el esfuerzo y el mérito del empresariado catalán, que ha sabido crecer al margen del beneficio de las Administraciones públicas. Este mismo razonamiento le ha servido para plantear que en pleno siglo XXI “Cataluña no puede volver a una dependencia de otros poderes públicos, aunque tengan una naturaleza autonómica”. Gallardón ha añadido que “el destino de Cataluña es liderar España y contribuir de forma notable al liderazgo de Europa”.

Pero más allá de los elogios a la sociedad catalana, el ministro ha querido replicar una vez más al presidente de la Generalitat, Artur Mas, quien el domingo insistió en que la Constitución y las leyes deben tener en cuenta la voluntad del pueblo catalán. Aunque asegura ser partidario de reconocer y reforzar la identidad catalana, el dirigente popular ha advertido de que ya es hora de “decir la verdad” y de que en una Europa en la que los países han cedido soberanía económica y monetaria (y previsiblemente su política fiscal a corto plazo) para mantener una relación de interdependencia, no se puede plantear ahora un proceso independentista.

Gallardón considera que la independencia de Cataluña sería “un castigo económico irreversible para toda una generación” y sitúa la posibilidad de un referéndum “fuera de la ley, de la realidad y de la historia”.

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Sobre los resultados electorales que el PP puede cosechar el próximo 25 de noviembre en Cataluña, con unas encuestas favorables que pronostican un ligero crecimiento para su partido, Gallardón ha señalado que el proyecto y el discurso de Alicia Sánchez-Camacho es el que “más y mejor garantiza el futuro de Cataluña”, por lo que da por hecho que serán muchos los catalanes que se decantaran por la centralidad en las próximas elecciones catalanas.

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