La Junta se replantea el principal proyecto industrial de Cádiz

En Andalucía hay muchos proyectos con hoja de ruta pero sin dinero. Y en Cádiz, hay un proyecto con dinero pero sin hoja de ruta. Por este motivo la Junta de Andalucía ha decidido apostar por el relanzamiento del proyecto de Las Aletas, un parque logístico y empresarial en Puerto Real, considerado de interés autonómico, pero lastrado por las complicaciones jurídicas que supone asentarse en suelo declarado dominio público marítimo terrestre. El Gobierno andaluz, que este martes nombra a sus representantes en el Consorcio de Las Aletas, va a proponer que este órgano compre los terrenos que dejó vacíos la empresa de automoción Delphi, situados enfrente de donde inicialmente se pensó este, de momento paralizado, polígono industrial.

Hace cinco años que las diferentes administraciones soñaron en 527 hectáreas de Puerto Real el parque industrial de Las Aletas. Un sueño sobre unas marismas desecadas con una ubicación idónea para ser el revulsivo económico que necesitaba la depauperada economía de la bahía gaditana. Los terrenos se ubicaban cerca de tres autovías, junto a la línea de ferrocarril y el muelle de la Cabezuela, y no demasiado lejos del aeropuerto de Jerez. Pero el sueño se volvió pesadilla cuando todo el plan inicialmente pensado, tras numerosos avatares administrativos, se vino abajo después de que el Tribunal Supremo anulase el proyecto al atender una denuncia ecologista. La justicia consideraba que las administraciones no habían justificado la necesidad de ocupar suelo protegido por la anterior ley de Costas para un polígono industrial.

La sentencia supuso un duro mazazo para el proyecto que, aún así, nunca ha sido desestimado. De hecho, cuenta con 84 millones de euros de presupuesto para desarrollarlo. Pero el lío judicial que supone sacarlo adelante, ya que requiere de una orden del Consejo de Ministros que dé vía libre a un nuevo proyecto, lo mantiene parado. Otro problema venía dado por la imposibilidad de reunirse su principal órgano ejecutor, el Consejo Rector del Consorcio de las Aletas, en el que están representadas todas las administraciones, los sindicatos y los empresarios. Y no se ha reunido en el último año, debido a los cambios en el organigrama que han traído las elecciones generales y autonómicas.

El Gobierno de Rajoy nombró en marzo a la presidenta del Consorcio, la subsecretaria de Hacienda, Pilar Platero. Y la Junta de Andalucía ha esperado hasta este martes para elegir a la consejera de Presidencia, Susana Díaz, como vicepresidenta. A partir de este nombramiento, ya se podrá reunir este órgano y tomar las primeras decisiones. Y la Junta acude con una propuesta revolucionaria. Cambiar por completo el proyecto. La propuesta, adelantada este lunes por Susana Díaz, se basa en que el Consorcio de las Aletas desarrolle 127 hectáreas, las que no están afectadas por la sentencia del Tribunal Supremo, y como hay presupuesto para más, ese dinero se utilice para comprar suelo en otro lugar del inicialmente previsto, concretamente el millón de metros cuadrados que la multinacional Delphi dejó vacíos cuando cerró sus puertas en 2007 y dejó en la calle a 1.500 trabajadores.

La previsión de la Junta es que si el Gobierno central da el visto bueno a esta idea esos suelos pueden estar listos para atraer nuevas empresas en el plazo de un año. De lo contrario, de seguir adelante con lo inicialmente pensado, ninguna inversión podría hacerse realidad antes de tres años. Para elevar esta propuesta, el Ejecutivo autonómico se agarra al artículo 3.2 de los estatutos del Consorcio de las Aletas, que dice que este órgano podrá actuar fuera del ámbito territorial inicialmente previsto. Se compara con la Zona Franca de Cádiz, cuyo consorcio también está promoviendo inversiones por municipios de toda la provincia gaditana, fuera de su recinto interior en la ciudad de Cádiz.