En medio de la tormenta desatada por las imparables filtraciones internas que detallan las valoraciones de Marcelo Bielsa sobre el comportamiento de sus jugadores en las dos finales perdidas la pasada temporada, el presidente del Athletic, Josu Urrutia, convocó ayer una rueda de prensa para decir fundamentalmente que no ha escuchado la cinta “ni pienso escucharla porque no me pertenece”. Eso sí, niega que la filtración parta del club.
Con su postura, alejada del inicio una investigación para depurar responsabilidades que zanjen la perplejidad generalizada, dentro y fuera del Athletic, Urrutia quiere “discreción” porque considera “reprobable para todos que volvamos a hablar de esto cuando estamos saltándonos las normas de un equipo”, añadió. Por todo ello pidió que “no se siga dando cuerda” a las filtraciones.
En el resto de la agenda de asuntos pendientes de confirmación oficial por parte del presidente del Athletic, sin novedad en el futuro de Llorente. “Es un gran jugador, estamos dispuestos a renovarle, pero no tenemos constancia de que haya cambiado de opinión y quiera continuar aquí”. En cuanto a la sonada expulsión de Llorente de un entrenamiento, decidida por Bielsa al advertir un bajo rendimiento del delantero, el presidente lo reduce a “una situación puntual que se da en el fútbol y otras veces no se resalta tanto”, admitió.
Por contra, Urrutia estuvo menos contemplativo con Javi Martínez, otro foco de polémica desde el pasado verano, al que recordó su patético episodio del salto de la valla en Lezama para recuperar de madrugada sus pertenencias. Lo aprovechó para responder al jugador navarro del Bayern, quien el pasado miércoles dijo en Madrid que “la filtración en un club que me ha dado tanto como el Athletic es muy triste”. Según Urrutia, “hablando de tristezas, esa puede ser una de ellas”, en relación al inédito salto de la valla. En cambio, no avanzó nada sobre la posibilidad de que el Athletic demande al Bayern Munich por este traspaso: “hay dos años para decidir”. Más fácil se presenta el recurso a la absolución de los delitos de lesiones públicos al aficionado que lanzó una botella en el estadio Villamarín contra Armando, portero del Athletic, en 2008. No obstante, Urrutia, con prudencia, dijo: “lo estamos valorando y tenemos intención de recurrir”.
La rueda de prensa comenzó tras conocerse la renovación por tres temporadas, hasta junio de 2016, de Gaizka Toquero, el jugador vitoriano que dispondrá de una cláusula de rescisión de 25 millones. Ahora queda Fernando Amorebieta.
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