Por una nueva ley de patrocinio
La Junta quiere que empresas y autónomos puedan ser receptores del mecenazgo
“El modelo que hace depender la cultura exclusivamente de los presupuestos públicos es un modelo que se agota en sí mismo”, aseveró este miércoles en Sevilla el consejero de Cultura, Luciano Alonso, antes de adelantar algunas de las medidas que incluirá en el borrador de la futura ley de mecenazgo. Alonso recordó que la industria cultural genera unos 700.000 empleos y más del 3% del Producto Interior Bruto y que el Gobierno andaluz mantiene su compromiso de hacer de la cultura un elemento dinamizador. “Nuestro objetivo es cambiar la cultura del ladrillo por la de las personas”, afirmó.
El punto de partida del borrador es superar el alcance del modelo en vigor e incorporar a las empresas y autónomos como receptores de los beneficios del mecenazgo proveniente de personas físicas. Actualmente, el modelo de colaboración público-privada, según la Ley de Mecenazgo de 2002, está destinado exclusivamente a las entidades sin fines lucrativos. “Nuestros modelos son países como Italia, donde se puede deducir el 100% de las donaciones para fines culturales, o Alemania, donde tanto las personas físicas como las empresas pueden deducir de sus impuestos hasta el 20% a instituciones o actividades de utilidad pública”, aclaró el consejero.
La Consejería de Cultura apostará también por el “micro-mecenazgo”, es decir, la deducción en la cuota del IRPF de lo invertido en actividades culturales. “Cosas como comprar un cuadro o una entrada para la ópera son actividades en las que se podría aplicar una deducción hasta un máximo por inversión y consumo cultural”, afirma Alonso. En la lista de 20 medidas (12 fiscales y 8 no tributarias) figuran también la ampliación de los beneficios actuales en sucesiones y donaciones a empresas culturales; la cesión de uso de espacios culturales públicos como incentivo a empresas y particulares; la extensión de los fondos reintegrables a préstamos destinados a mejoras de los Bienes de Interés Cultural (BIC) o la creación de un registro público de actuaciones y bienes prioritarios de acciones de mecenazgo, así como la elaboración de un registro de mecenas.
La Asociación de la Prensa de Sevilla estudia los nuevos modelos de gestión del patrocinio
“Estamos trabajando en un anteproyecto que estará en el Parlamento lo antes posible”, se limitó a decir el consejero para contestar a la pregunta sobre el calendario de la nueva norma que establezca un marco jurídico en el que pueda desarrollarse “una estrategia de acción conjunta público-privada en la financiación de la cultura”, apuntó Alonso durante la conferencia inaugural, ayer en la sede del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC), de unas jornadas sobre patrocinio y mecenazgo que organiza la Asociación de la Prensa de Sevilla.
Francesca Minguella, directora de la Asociación Española para el Desarrollo del Mecenazgo Empresarial; Juan Antonio Estrada, abogado y gestor cultural, y Pablo Dopico de Godos, historiador del Arte y coordinador del Instituto de Arte de Madrid, son algunos de los ponentes de las jornadas Patrocinio y mecenazgo: Creatividad y financiación. Fórmulas de comunicación e imagen que se desarrollarán hasta mañana y que están dirigidas por la periodista Susana Muñoz Bolaños.
Las jornadas, destinadas a gestores culturales y periodistas —un sector que sufre más paro que el de la construcción—, son un buen ejemplo de lo que predican ya que cuentan con 15 patrocinadores públicos y privados y otros tantos colaboradores para los tres días de ponencias y mesas redondas.
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