La Sala Beckett arranca con una apuesta por los autores italianos

En una temporada teatral marcada por los recortes y por la presencia de autores catalanes contemporáneos, la Sala Beckett apuesta por creadores vivos, pero extranjeros. Un ciclo de obras de autoría italiana encabezará la nueva programación de la sala de experimentación teatral, empezando por Variaciones sobre el modelo de Kraepelin, de Davide Carnevali. La historia personal de un hombre con alzhéimer que está perdiendo su identidad y esencia de su vida, cuestiona nuestra propia posibilidad de reconstruir la historia y de comprender la realidad.

Artur Trias encarnará a un hombre que no quiere recordar su pasado. Ha vivido guerras y otros episodios dramáticos pero no logra atar las piezas en orden cronológico. Enfermo de alzhéimer y acompañado de su hijo y un médico (Jordi Brunet y Hans Richter) se embarcará en la misión de reconstruir un pasado que en el proceso se volverá cada vez más confuso.

“La memoria es un reflejo ficticio del pasado”, señala Carnevali. “Nuestra percepción sobre lo que sucedió se basa en nuestra capacidad de recordar. La intención de la obra es demostrar, a través de un caso que no corresponde a esa lógica, que nuestro sentido de la realidad es muy limitado”.

El montaje, que se estrena el próximo jueves, es también “la historia colectiva de Europa, que en la memoria de sus guerras y con sus constantes cambios políticos, sigue en la búsqueda de su definición”, explica el autor.

El ciclo de autores italianos continuará primero con La fiesta, del autor Spiro Scimone y dirección de Orlando Arocha, y después con Vísperas de la Beata Virgen, ideada por Antonio Tarantino y dirigida por Jordi Prat i Coll.