Diálogos entre el baile y Sevilla

La Bienal de Flamenco de Sevilla ha decidido pasearse unos días por los rincones de la ciudad cargados de historia. Los conciertos, los talleres y las charlas, entre otras actividades, se salen de sus espacios habituales en esta edición, y el motivo no es otro que montar un diálogo entre Sevilla y el flamenco, especialmente con el baile. Una ciudad para el flamenco es el nombre que recibe está programación especial que hace la Bienal por primera vez en su historia.

Para la directora de la cita, Rosalía Gómez, este espacio que se crea dentro del certamen para llevar espectáculos a la calle es uno de sus proyectos más queridos. “Si hay una ciudad que tiene huellas de baile, esa ciudad es Sevilla. Hay un montón de sitios que tenemos que ir descubriendo y provocando a los artistas para que se relacionen con ellos”. A lo largo del mes de septiembre, una veintena de propuestas de acceso gratuito servirán para crear las conversaciones con la ciudad, que se transmitirán a través de clases de bulería y de compás, conciertos, conferencias, flashmob y, sobre todo, mucho baile.

Actores con zancos y máscaras se moverán hoy por la plaza del Triunfo

Una procesión de actores con zancos, grandes trajes de telas sedosas, paraguas gigantes y máscaras conformados como un cortejo exótico acompañado de música balinesa se moverán por la plaza del Triunfo esta noche. Ellos son el Teatro Tascabile de Bérgamo (Italia), y su espectáculo Il giardino dei peri inaugura la programación a las 21.10 de Una ciudad para el flamenco. Giuseppe Chierichetti es uno de los actores de la compañía italiana y este miércoles explicó, en el Convento de Santa Clara, que la idea es construir una arquitectura de relaciones entre los actores y el espacio. Con esta metáfora de Oriente llegarán a las diez de la noche al Real Alcázar. Allí comenzará el espectáculo Las huellas, donde la danza clásica india de estilo kathak compartirá escenario y tiempo con el flamenco de la bailaora Rosario Montoya, La Farruca.

Las huellas, el espectáculo más arriesgado dentro de la Bienal, une a dos grandes familias. La de los Farruco, liderada por Rosario Montoya, enfrentará su flamenco a la familia más consagrada de India en danza clásica de estilo kathak. Se trata de demostrar cómo dos danzas remotas están emparentadas. Por ello bailarines indios y bailaores flamencos interpretarán juntos palos del arte jondo como las bulerías y los tangos, explicó este miércoles Montoya. Un riesgo grande, ya que ambas familias solo han tenido dos días para ensayar.

Un espectáculo unirá a dos estirpes de las danzas india y flamenca

Farruco, el patriarca de la familia Montoya, conocía la danza kathak, aseguró este miércoles su hija. “Tiene un nexo de unión, eso lo llevo yo en el alma. Farruco, mi padre, era amante de ella y tenemos muchos vídeos. Esto no es que sea acoplarse el uno al otro, sino un encuentro”, cuenta la bailaora. Para Anuj Mishra, bailarín que pertenece a una de las más antiguas estirpes de esta danza del norte de India, no es algo nuevo bailar junto a flamencos. Mishra contó que en los últimos dos años ha bailado con frecuencia con compañías europeas de danza contemporánea y clásica, y también con artistas flamencos.

El resto de programación de Una ciudad para el flamenco se distribuye, a lo largo de las cuatro semanas que dura la Bienal, por diversos espacios de la ciudad, como el Paseo Marqués de Contadero, los Jardines de la Buhaira, el Parque de María Luisa o el Mercado de Triana. Las actividades de la calle principalmente girarán en torno al baile, ya sea como espectáculo o taller. Pero todo tiene cabida en estos espacios. El proyecto Metrosol Parasol, más conocido como las setas, estará reservado el viernes a las nueve y media de la noche para el concierto de la Banda Sinfónica de Sevilla. Al día siguiente, José Galán desarrollará una intervención de seis minutos en las escaleras, titulada Minotauro, mientras que en la parte de arriba de las setas estarán Vanesa Aibar y Manuel Roldán con Extra-bio.

Eduardo Rebollar (conferenciante, guitarrista), Yolanda Lorenzo (bailaora) y Manuel Romero (cantaor) impartirán el 12 de septiembre unas clases de compás que se acompañaran de baile. Carina la Debla, bailaora de flamenco alemana, estará, junto al guitarrista Eduardo Trasiera, el 15 de septiembre en el Paseo Marqués de Contadero para ofrecer Farruca forastera. Estos son algunos de los artistas que componen Una ciudad para el flamenco, a la que, como cierre de la programación y en tan solo cuatro minutos, se pretende consagrar, el 29 de septiembre en la Plaza Nueva, el diálogo del baile y la ciudad con un flashmob coreografiado por Rafaela Carrasco.