Una nueva avería en Rodalies obliga a evacuar 300 pasajeros de un tren

Una avería sacudió este lunes por enésima vez el servicio de Rodalies de Renfe cuando un tren se quedó trabado en el túnel que une las estaciones de Arc de Triomf y Sagrera-Meridiana a las 15.50 horas. Sus 300 viajeros tuvieron que ser evacuados mediante plataformas a otro tren una hora después. Pero en esos momentos la inutilización de la vía afectada y la creación de rutas alternativas ya había extendido el percance en forma de retrasos a otras líneas. La R-3 —la del tren afectado—, la R-2 y la R-4 funcionaron con hasta 30 minutos de desfase según los horarios previstos.

El tren afectado había salido de Vilafranca e iba destino a Manresa cuando, al cruzar Barcelona, los pasajeros notaron que el convoy perdía fuerza motriz y en su interior se apagaba la luz. Tras 15 minutos de espera, el maquinista les informó a través de la megafonía interna que se trataba de una “avería mecánica” y 45 minutos después un tren con dirección a Vic (Osona) se puso al lado y permitió el transbordo de los viajeros, a los que acercó hasta la estación de Sagrera.

“Lo que más rabia me ha dado es ver que estábamos a 10 metros del andén y que no nos hayan dejado bajar antes e ir caminando hasta la estación”, señalaba Víctor Feliu, uno de los pasajeros víctima de la avería, que admitía la posible existencia de un protocolo de seguridad que lo impidiera. La evacuación de pasajeros obligó a activar en fase de prealerta el plan Ferrocat de la Generalitat.

El tren no se pudo retirar hasta tres horas después, lo que obligó a Adif a utilizar el paso por la estación de Passeig de Gràcia para minimizar las afectaciones, sobre todo, en las líneas de Vic y Manresa, obligadas a cruzar Barcelona por vía única.

El accidente se suma a la ristra de averías que afectan periódicamente al servicio de Rodalies, fuente de duros enfrentamientos entre el Gobierno catalán y el Ministerio de Fomento, a causa del déficit inversor del Estado. Los accidentes más graves se produjeron en mayo de 2011 y en enero de este año en el túnel de entrada de la estación ferroviaria del Clot-Aragó, cuando casi en el mismo lugar dos trenes embistieron a otros que esperaban delante a la espera de poder seguir la marcha.