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El polvo sahariano se queda un día más

Madrid pidió ayer que se usara el transporte público para no contribuir a la contaminación

Elena G. Sevillano

Pasaban unos minutos del mediodía de ayer y el mapa que muestra el estado de la contaminación en la capital aparecía teñido de amarillo y naranja. Siete de las 24 estaciones de medición de la red municipal tenían una calidad del aire “deficiente”, que es lo que quiere decir el color naranja. Los vecinos de Sanchinarro, la plaza de Castilla, Castellana, Farolillo, Méndez Álvaro y Puente de Vallecas estaban respirando más partículas en suspensión de las recomendables. También en la Casa de Campo, algo poco habitual, se registraban 107 microgramos por metro cúbico de partículas PM10 a las once de la mañana.

La ola de calor no ha llegado sola. La nube de polvo africano que afecta al centro de la península Ibérica desde hace unos días se notó ayer especialmente en el cielo de la capital. A simple vista, pero también en los registros del sistema de medición de la calidad del aire del Ayuntamiento de Madrid y de la Comunidad —en localidades como Fuenlabrada, Móstoles, Alcorcón, Aranjuez y Arganda del Rey se superaron en varios momentos del día los 100 microgramos por metro cúbico de partículas—. Ambas Administraciones pedían ayer a los ciudadanos que usaran el transporte público para no contribuir aún más a la contaminación del aire. La Consejería de Medio Ambiente también recomendaba que “las personas con problemas respiratorios” redujesen las actividades “que supongan esfuerzo físico al aire libre”.

Polvo también hoy

También hoy está previsto que siga habiendo más partículas en suspensión en el aire de las habituales. Un aviso en la página web de la Comunidad indica que se pueden registrar “concentraciones máximas de polvo africano a nivel de superficie que podrían alcanzar valores de entre 50 y 80 microgramos por metro cúbico en zonas del sureste y centro de la península Ibérica, debido a un episodio de intrusión de masas de aire africano”.

Además de un límite anual, la legislación europea prevé una media diaria máxima (50 microgramos/metro cúbico) en partículas en suspensión que no debe superarse más de 35 días al año. En el año 2011 Madrid capital vulneró ese límite, ya que la estación de Escuelas Aguirre registró 38 superaciones del valor límite diario. Ayer, por tanto, se registraron picos que doblan el máximo diario permitido por la normativa.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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