“La oferta de alianza no es solo para el Parlamento, es algo más profundo”

La coordinadora nacional de Esquerda Unida, Yolanda Díaz (Fene, 1971), agitó el mapa político al margen de los tres partidos parlamentarios con su oferta de “alianza anticapitalista” dirigida a otros grupos de izquierda y nacionalistas. Respondía, así, al llamamiento de Xosé Manuel Beiras, ahora líder de Anova. Díaz insiste: “La situación es de emergencia, estamos en un estado de excepción, y necesitamos una respuesta extraordinaria”.

Pregunta. ¿Entra en sus cálculos que Feijóo pierda las elecciones?

Respuesta. Todo apunta a que sí y la reforma electoral exprés que quiere aprobar indica que no tiene mayoría absoluta.

P. ¿Qué diagnóstico hace Esquerda Unida de la situación?

“Feijóo nos coloca en tiempos peores que la época de Fraga”

R. Galicia, y así lo recogen nuestros documentos, está expropiada. Feijóo es un adelantado a la troika. En asuntos como la cultura y la lengua, pero también socialmente, nos coloca en tiempos peores que los de Fraga. Es una situación de emergencia para la mayoría social.

P. En ese paisaje, ¿cuáles son sus expectativas electorales?

R. Somos una organización humilde, que lleva años trabajando para hacer oir la voz de los hombres y mujeres que sufren la crisis. Ahora, las encuestas, las nuestras y también otras, dan que vamos a entrar en Parlamento.

P. Desde la primera legislatura y el Partido Comunista de Galicia, la tradición de Esquerda Unida ha estado ausente de O Hórreo. ¿Por qué?

“Necesitamos una herramienta política para ayudar a los de abajo”

R. Ya estuvimos tras el pacto de Anxo Geurreiro con el PSdeG. Lo que nos ocurrió estos años e que nuestro discurso fue muy adelantado, muy vanguardista para su época. Lo que ahora está pasando da la razón a nuestros análisis de entonces. Para los partidos minoritarios siempre fue muy difícil llegar al Parlamento, y la reforma electoral de Fraga lo puso aún más difícil. La crisis de otras formaciones de izquierdas también contribuye a nuestra subida.

P. Si las perspectivas electorales resultan tan positivas, ¿a qué se debe la oferta de una alianza anticapitalista a otros grupos de izquierda?

R. No se trata de entrar o no en el Parlamento, porque nosotros vamos a entrar igual. Se trata de algo más profundo e importante, de largo recorrido. Hay una guerra entre los de abajo y los de arriba, y es necesario desbancar las políticas neoliberales y ayudar a los de abajo. Para ello es necesario todo pensamiento crítico y una nueva herramienta política. Se trata de construirla.

P. Usted apela a Syriza [coalición de izquierda griega]. ¿Le parece un modelo válido para Galicia o solo una analogía?

“La urgencia de la situación exige acuerdos con los nacionalistas”

R. A veces traducimos Syriza como “izquierda radical”, pero es una coalición de organizaciones muy plurales capaces de ponerse de acuerdo en un programa de 40 puntos. Con elementos tan sensatos y necesarios como elevar el salario mínimo. Se han enfrentado a la troika y al memorándum. Syriza es una luz.

P. ¿Qué significa definirse “anticapitalista”?

R. Cuestionar el sistema, rebelarse. Esta política lleva a Grecia, a la miseria y a la barbarie. Es este modelo, el sistema capitalista, el que causa la crisis.

P. Espazo Ecosocialista, que forma parte de Compromiso, afirmó que “la gente no demanda una coalición anticaptilista”.

“El BNG debe decidir donde quiere estar y, tal vez, hacer autocrítica”

R. Respeto a cada organización, pero si viviéramos en un sistema no capitalista nos iría mejor.

P. ¿Esas declaraciones no alejan una posible convergencia?

R. No va a ser por EU que no lleguemos a acuerdos, siempre con un programa sobre la mesa.

P. Una coalición de EU, organización de ámbito estatal, con la izquierda nacionalista rompería un tabú. Lo intentó el PSG en su día y fracasó.

R. No creo que exista un tabú. IU no es una organización estatal, sino federal, y en la federación gallega tenemos total autonomía. Nos parece natural llegar a acuerdos, porque aunque no somos nacionalistas —en defensa de la cultura sí estamos en esa línea—, la urgencia de la situación exige que los busquemos y estemos con los de abajo.

P. Beiras aseguró que lo único que exigirá Anova será respeto por el derecho de autodeterminación. ¿EU lo admite?

R. ¿Cómo no lo va a admitir? Además de que lo recogemos en los textos, es un derecho democrático. Los pueblos deciden su futuro. Lo demostramos, por ejemplo, con el Pacto de Lizarra.

P. El secretario general del PCG, Carlos Portomeñe, aseguró que veía “difícil” pactar con Anova. Llegar a acuerdos con nacionalistas, ¿tensiona las bases de Esquerda Unida?

R. Portomeñe dice exactamente lo mismo que yo, que hay que hablar con un programa en la mano. Es lo normal, pero en este país no tenemos esa costumbre. Si creemos lo que ponemos en los textos, tenemos que intentarlo, constituir un bloque social en sentido gramsciano para subvertir el orden establecido.

P. Para los contactos con otros partidos, que comenzarán esta quincena, ¿Ponen condiciones previas?

R. Vamos a ir a esos encuentros sin prejuicios, para hablar de todas las cosas.

P. ¿El Bloque podría estar en esta alianza?

R. Partimos de que nos somos suficientes los que somos, y de una cultura muy propia del Partido Comunista, la de la generosidad para llegar a acuerdos. Pero será el BNG el que decida donde quiere estar. Tal vez debieran hacer autocrítica de algunas políticas.

P. ¿Y el PSdeG?

R. No partimos de a prioris, pero el PSOE es un partido del régimen. Nosotros pensamos que el régimen llega a su fin. Estamos en un estado de excepción. Si el PSOE rectifica y reconoce que se equivocó, por ejemplo, en el golpe de Estado de la reforma constitucional... Pero no parece, por las declaraciones de Rubalcaba...

P. ¿No juega en Galicia un papel diferente?

R. La urgencia, ahora, es echar democráticamente a Feijóo y sus compañeros. Porque acaban con todo.