Los ‘manteros’ desaparecen de Alicante

La popular Explanada de Alicante y su prolongación por el paseo de la playa de El Postiguet son habitualmente, y más en época estival, una alfombra de mantas en las que los inmigrantes exhiben su mercancías. Desde la noche del sábado, ese escenario urbano, e incluso el paseo marítimo de la playa de San Juan, está expedito. Ni rastro de estos inmigrantes (subsaharianos, árabes, chinos y suramericanos) conocidos coloquialmente como manteros.

Los inmigrantes han optado por quedarse en casa para sortear la presión policial, un amplio despliegue (Policía Local y Policía Nacional) en busca del autor de la agresión que la noche del sábado hirió de gravedad a un agente.

El agresor, que según los primeros datos de la investigación, podría un ciudadano senegalés, todavía no ha sido localizado. Sólo hay un detenido por estos hechos. El domingo, los agentes arrestaron a otros 13 manteros. El concejal de Seguridad Juan Seva, del PP, no rechazó la conexión de esta operación con la agresión al policía.

La asociación senegalesa condena la agresión al policía

La agresión, según relató este lunes Seva, se produjo al filo de las once de la noche, cuando el agente herido, junto con otro compañero (ambos miembros de la unidad especial de lucha contra la venta ambulante y consumo de alcohol en la calle) se dirigió, a raíz de la llamada de un vecino, a un punto de la Explanada, en la confluencia de la Rambla de Méndez, para identificar y requisar el material a un grupo de unos 12 manteros subsaharianos.

Estos manteros no reaccionaron de la manera habitual, es decir, salir corriendo para proteger la mercancía, sino que se encararon con los agentes y comenzaron a agredirles. Uno de los agentes recibió un sillazo en la cabeza que le causó un derrame cerebral. “El agente ha estado en la UCI en coma, afortunadamente se ha recuperado y su vida no corre peligro”, dijo Seva. El segundo agente recibió un impacto en un ojo y fue dado de alta a las pocas horas de ser atendido en el hospital General de Alicante.

A pesar de que el autor material de la agresión al policía de Alicante no ha sido aún identificado ni arrestado, la Asociación Senegalesa en España se pronunció ayer sobre estos hechos, ante las sospechas de que el agresor pudiera ser un ciudadano de este país. “Lo primero que tenemos que decir es que condenamos la agresión al policía, igual que cualquier acto de violencia”, dijo el portavoz del colectivo, Hamady. “Si hubiera sido un ciudadano de nuestro país pedimos disculpas”, añadió.

El concejal de Seguridad, Juan Seva, insistió en que la agresión “fue un acto premeditado”

Hamady, que adelantó que el colectivo hará hoy público un comunicado oficial, resaltó el “carácter pacífico” de los inmigrantes senegaleses y señaló que no alcanzaba a explicarse los motivos de esa reacción violenta. “Está claro que es un hecho aislado que no responde a la conducta habitual de los senegaleses”, explicó. No obstante, este inmigrante, pese a defender la acción policial contra la venta ambulante ilegal, apuntó a la crisis como causa de ese episodio violento. “Está claro que los inmigrantes solo tienen su mercancía y quizás, ahora, la intentan preservar con más ahínco”, explicó. Hamady aseguró que a la asociación no le consta ninguna queja de los inmigrantes sobre la actitud hacia ellos del agente agredido.

Mientras, el concejal de Seguridad, Juan Seva, insistió en que la agresión “fue un acto premeditado”. “Nada más llegar los agentes y cuando intentaban identificarlos comenzaron a agredirlos con las sillas de madera plegables y con dos tubos de hierros sujetos a una tabla con tres clavos”, explicó.

Seva descartó que la agresión, como sostienen algunos vendedores de la zona, estuviera relacionada con algún incidente anterior entre el policía y los manteros. “No nos consta nada en ese sentido. El agente herido lleva 10 años en esta unidad y su expediente es intachable”, aseveró el edil.

El concejal de Seguridad Ciudadana ni confirmó ni desmintió que la agresión vaya a provocar una mayor presión polical contra los manteros. “Seguiremos igual, es decir, cumpliendo con nuestra obligación y compromiso de erradicar la venta ambulante ilegal que supone una competencia desleal”, explicó el edil.

Seva, en cambio, admitió que la agresión sí llevará a la policía a replantearse su estrategia a la hora de combatir a los manteros.