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RAFAEL RODRÍGUEZ/Consejero de Turismo y Comercio

“No hay ninguna hipoteca, lo que haya que cambiar se cambiará”

El consejero de Turismo y Comercio apuesta por la búsqueda de consenso para fijar prioridades

Rafael Rodríguez, en la sede de la empresa pública Turismo Andaluz, el pasado 27 de julio
Rafael Rodríguez, en la sede de la empresa pública Turismo Andaluz, el pasado 27 de julioGARCÍA-SANTOS

Después de haber sido en su momento el diputado más joven del Parlamento andaluz, portavoz de IU en la convulsa etapa de la pinza, concejal y vicepresidente de la Diputación de Málaga, y enriquecer su capacidad de análisis en los últimos ocho años como consejero de la Cámara de Cuentas, Rafael Rodríguez (50 años) afronta con aplomo el que considera “peor momento de los posibles para que IU tenga su primer experiencia de Gobierno”, al frente de la consejería de Comercio y Turismo, dos sectores capitales para la economía regional.

Pregunta. Cuando se ha puesto a gobernar, afloran algunas contradicciones en IU, que siempre ha defendido declarar zonas saturadas en la costa, o la implantación de una tasa al turismo, que ahora da de lado.

Respuesta. Cuando se gobierna se tiene la responsabilidad de priorizar en cada momento, y en el marco de la crisis en la que estamos, de dificultades económicas en las que estamos y con los recortes permanentes en materia de prestaciones y derechos, el contexto no es el más adecuado para poner en marcha ningún tipo de tasa, cosa que no descartamos para el futuro. En cualquier caso lo que siempre hemos dicho es que si impulsamos alguna tasa de estas características será siempre ligada a inversiones en el sector para mejorar la oferta, y no con una vocación 100% recaudatoria. Pero este no es el momento adecuado y en el futuro, ya veremos.

P. ¿Cómo ha afrontado o sufrido los recelos que despertó en el sector la cesión de la consejería de Turismo a IU?

R. Supongo que todo cambio genera incertidumbre, es natural. La interlocución que tengo con el sector es muy buena, con los sindicatos y con la patronal y creo que hay un diseño global de actuaciones en el que estamos razonablemente de acuerdo. Hay un camino ya andado en la mesa del turismo que facilita las cosas, siempre ha habido interlocución en este sector. Yo no me quejo, y la receptividad del sector en la práctica en el momento que se plantean objetivos e instrumentos para conseguirlos ha sido positiva. Podría haber en principio sectarismo alentado desde determinadas instancias de la vida política andaluza y lógicamente incertidumbre, pero las dinámicas se van asentando en la medida que se van desarrollando y desde la consejería hemos hecho una apuesta clara por la interlocución social, la defensa de un turismo de claidad y la sostenibilidad y excelencia del modelo; y una serie de instrumentos para articular todo ello como el pacto andaluz por el turismo, el plan estratégico de turismo sostenible, contra la estacionalidad, de modernización y el de marketing. Vamos a ver como se va articulando, apenas llevamos dos meses y la legislatura son cuatro años.

El momento no es el adecuado para implantar ningún tipo de tasa, en el futuro se verá"

P. La empresa pública Turismo Andaluz ha estado en el punto de mira de la oposición. ¿Ha levantado alfombras?

R. Lo que quiero cuando entro en cualquier ámbito de gestión es que al día siguiente se note que haya un impulso para poner en marcha iniciativas, diagnosticar problemas y solucionarlos. Nos hemos encontrado una situación complicada, como el conjunto de las administraciones públicas, de disponibilidades económicas muy limitadas con un presupuesto para 2012 prácticamente gastado y una serie de compromisos que no tenían disponibilidad presupuestaria. Hemos tenido que reordenar eso y creo que hemos sido ágiles. Esta empresa tiene trabajadores muy cualificados y una gran capacidad y tenemos que aprovecharla para que todos los sectores implicados en el turismo vean en la empresa pública aliados para diagnosticar problemas y poner en marcha instrumentos para resolverlos. Hay que trabajar mirando hacia adelante y con optimismo a pesar de todo.

P. El agotamiento del presupuesto solo es debido al ajuste o hubo una alegría de gasto en el primer trimestre, periodo preelectoral.

 R. El presupuesto de 2012 lo votó en contra IU y nos lo encontramos aprobado cuando llegamos al Gobierno. Nuestras prioridades se empezaran a notar en el de 2013, sea cuales sean las disponibilidades. No hay que obviar que en marzo hubo que hacer una no disponibilidad provocado por el plan de ajuste que se impone desde Madrid, y ello significa que presupuestos que estaban comprometidos de la noche a la mañana dejan de estarlo y genera distorsiones que estamos intentando resolver ordenando adecuadamente el prespuesto y poder afrontar 2013 con ese trabajo desgranado. No creo que haya habido una actitud especialmente de gasto en esta consejería. jería de gasto.

 P. Además de suprimir los patrocinios ¿tendrán también que suspender los proyectos de la iniciativa de turismo sostenible conveniados con ayuntamientos y empresas?

El turismo andaluz sigue siendo muy competitivo, pese a las dificultades

R. La principal tarea al tener una disponibilidad presupuestaria menor es revisar los compromisos adquiridos y priorizar. En patrocinio vamos a establecer unas normas internas que haremos pública para concluir que requisitos debe reunir una determinada actividad para se patrocinada por la consejería de Turismo, en función de impacto y retorno. Y después veremos como distribuimos el presupuesto. Con las iniciativas de turismo sostenible estamos viendo en que situación está cada una de ellas y la viabilidad que tienen. Hay alguna de ellas que no pueden ejecutarse porque la Junta tenga dificultad, pero también porque lo tenga el ayuntamiento o la empresa privada en cuestión. Y las que sean posibles, las ordenaremos en el tiempo con un calendario Lo que no vamos a hacer nunca es asumir compromisos que no podamos ejecutar o proyectar que se van a realizar actuaciones para las que luego no vamos a tener disponibilidad. Lo que digamos y nos comprometamos será aquello que podamos hacer, y si no puede ser en un año será en tres.

P. ¿Cree que ha habido despilfarro en los patrocinios?

R. En cada momento se articulan prioridades con base a las disponibilidades existentes y a lo que cada equipo considere. Desconozco el ámbito de decisión en etapas anteriores, en las que las disponibilidades eran distintas. Antes la consejería era también de deporte, lo que facilitaba algunos ámbitos en materia de patrocinio y ahora es diferente. Supongo que todos los equipos cuando asumen las tareas quieren hacerlo de la mejor forma posible. Lo que han cambiado son las disponibilidades presupuestarias y eso nos exige un mayor esfuerzo de eficiencia.

P. Hay datos que indican que la actividad turística se estanca. ¿Teme que el sector más dinámico de la economía andaluza entre en crisis?

R. Los datos de ocupación hotelera ponen de manifestó que en los seis primeros meses del año ha habido un comportamiento razonablemente positivo, con un descenso de las pernoctaciones del 1,1%, un poco mejor que la media nacional, y del 1,3% en viajeros. Son datos comparados con 2011 que turísticamente fue muy bueno. Andalucía depende en un 60% del turismo nacional a diferencia de otros destinos, y hay un importante descenso de éste l compensado con el crecimiento del internacional. Sin esa caída, los datos serían extraordinarios. En todo caso se pone de manifiesto que Andalucía tiene una fortaleza magnífica como destino que nos hace ser competitivos pese a las dificultades y las políticas del Gobierno de recortes que exprimen las posibilidades de consumo. Tenemos un producto de calidad, buenos profesionales y segmentos muy competitivos. Las previsiones dicen que podemos estar un 0,1% mejor este verano que el pasado, que fue histórico.

P. No comparte entonces los augurios pesimistas de los empresarios.

Tener empleados fijos y formados no es un coste, es una inversión que mejora la competitividad

 R. Los empresarios tienen preocupación e inquietud por como puedan afectar todos los acuerdos del Gobierno al mercado turístico. Espero que a pesar de todo el producto turístico andaluz tiene las fortalezas para hacer frente a esas adversidades, sin las cuales los resultados podrían ser extraordinarios. Podemos hacer frente a las dificultades y es necesario lanzar un mensaje de optimismo y poner en valor los segmentos donde somos más competitivos.

P. ¿En esta situación de crisis e incertidumbre se pueden lanzar mensajes animando a la gente a viajar?

R. A los que puedan. A veces da cierto pudor hablar de turismo, de ocio y de la industria del consumo cuando hay 5.700.000 españoles en paro o 1.700.000 hogares en los que ninguno de sus miembros tienen ingresos. Pero también hay que decir que gracias al turismo hay aun en Andalucía una partre importante de actividad económica, generadora de actividad y de empleo que se está mantiendo a flote y nuestra labor es ponerla en valor.

P. La labor que compete a la administración es básicamente la promoción

R. Hay dos pilares, la planificación y la promoción. La planificación es básicamente pública. Impulsaremos el plan general de turismo sostenible que tendrá incidencia territorial, prevalencia sobre los planeamientos urbanos y subregionales. Se trata de avanzar en un modelo de calidad, sostenibilidad y excelencia, porque Andalucía no puede ser competitiva vía precio ni vía degradación de las condiciones laborales. Tenemos también una labor de persuasión, trasladar a los empresarios y a la sociedad en general que el producto turístico para que sea competitivo necesita inversiones, en materia de infraestructuras, con instalaciones modernas y un entorno sostenible, pero también en materia laboral teniendo empleados, fijos, cualificados y satisfechos. Cuando planteamos que una prioridad es el empleo estable, es que el empresario debe considerar un trabajador fijo y formado no como un coste que hay que asumir, sino como una inversión a realizar para que el producto sea más competitivo.

Los retornos del gasto público en promoción tienen que ser medibles

P. Usted siempre advierte que pertenece a un Gobierno de sustitución y no de sucesión. ¿Qué hay que cambiar en la política turística?

R. La consejería no tiene absolutamente ninguna hipoteca sobre la espaldas, y eso significa que lo que haya que cambiar se cambiará, que lo que haya que corregir se corregirá y lo que haya que continuar se continuará. Pero todo eso lo veremos en el proceso de interlocución que tenemos en marcha con los sectores implicados, en turismo y comercio. Tenemos en marcha un primera conferencia estratégica en octubre sobre turismo en Andalucía que será la primera piedra de toque de elaboración de ideas y de propuestas.

P. El grueso del presupuesto de la consejería es la promoción, que tiene un cierto carácter dicrecional. ¿Va a cambiar la línea seguida hasta ahora?

R. Hay que procurar la eficiencia de recursos destinados a la promoción. Un euro público tiene que tener 10 euros de retorno, pero esos retornos tienen que ser medibles, en viajeros que vengan porque han visto esa promoción, no en minutos de televisión. Si me gasto por ejemplo 100.000 euros en promoción en Inglaterra, quiero saber cuantos viajeros vienen porque han visto esa promoción, hay que poner en marcha esos indicadores y vamos a firmar un convenio con la Universidad de Málaga para desarrollarlos. La eficiencia se mide en retorno y en optimización, esto es, poner todos los recursos públicos sobre la mesa en un único plan de acción común.

P. ¿Cómo afectará al turismo la reforma de la Ley de Costas?

R. Me parece preocupante, y creo que no aprendemos de nuestros errores. El modelo de desarrollo turístico que necesita Andalucía no puede ser el de la ocupación masiva de la costa, al contrario, insisto en que nuestro modelo turístico debe ser sostenible, de calidad y de excelencia y esos tres pilares son absolutamente incompatibles con continuar llenando la costa de hormigón. Tenemos que proyectar de la costa un complemento de calidad, esponjado, incorporar espacios libres a la oferta turística. Afortunadamente el Gobierno no hace esta reforma como decreto y espero que pueda haber una negociación. El modelo no es que haya sido insostenible medioambientalmente, es que es económicamente inviable y nos ha llevado a esta ruina, deberíamos aprender de los errores.

P. El cogobierno con el PSOE, especialmente por las medidas de ajuste, parece que está teniendo un coste de contestación interna dentro de IU.

La experiencia de gobierno es muy satisfactoria, pese a las dificultades

R. Tenemos una organización muy transparente, y ahora con las redes sociales mucho más. Eso tiene sus ventajas y sus inconvenientes, somos así y tampoco nos va a cambiar estar en el Gobierno. Pero cuando se gobierna tienes que priorizar, hacer algunas cosas y descartar otras, y las que se descartan siempre tienen importancia para los colectivos o sectores afectados. Creo que la experiencia de gobierno es muy satisfactoria a pesar de las dificultades del momento y de las imposiciones desde el Gobierno central; para IU, la militancia y para la base social que nos llevó al gobierno y que nos ve con expectativas y con ilusión, e internamente se están alcanzando grados de cohesión muy importantes, a pesar de que el escenario es el peor de los posibles para tener la primera experiencia de gobierno.

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