CGT desconvoca la huelga de hoy en el Liceo, mientras UGT la mantiene

La sección del sindicato CGT en el Teatro del Liceo ha desconvocado la primera jornada de huelga  —del total de 15 convocadas por este sindicato y UGT— prevista para esta noche, coincidiendo con la última función de la ópera Aida, que será también la despedida de los escenarios del barítono menorquín Joan Pons. CGT aseguró ayer en un comunicado que mantienen el resto de convocatorias y sus reivindicaciones sobre sus condiciones laborales, pero que desde la convocatoria del paro no han tenido tiempo suficiente para negociar con la empresa. Solo UGT se mantiene firme pro ahora en la convocatoria de paro.

El sindicato UGT es mayoritario entre lo miembros del Coro del Liceo, que el pasado 22 de julio acordaron por mayoría secundar el paro. CGT domina loas departamentos de escenario y administración en los que los sindicatos no sometieron a voto la convocatoria de huelga. El comité de empresa se ha mantenido al margen de la convocatoria, aunque sean algunos de sus miembros en nombre de los sindicatos los que han presentando el aviso de paro en el departamento de Trabajo de la Generalitat.

Los trabajadores del Teatro del Liceo de Barcelona pidieron hace unos días a la Inspección de Trabajo un mediador para que interviniera en el conflicto laboral que mantienen con la dirección del teatro. El comité de empresa ha interpuesto la solicitud por “incumplimiento” del pacto que firmaron con la Fundación Gran Teatro del Liceo el pasado 22 de febrero, tras la retirada del expediente de regulación de empleo (ERE) temporal presentado ocho días antes, y que debía llevar a la consecución de un nuevo convenio colectivo.

El pasado 16 de julio el patronato de la Fundación Gran Teatro del Liceo aprobó un plan director para las próximas cinco temporadas que debe sustituir el contrato programa del teatro, que había expirado en 2009, en el que se persigue una mayor eficacia, eficiencia y optimización de los recursos. El plan director propone incrementar los ingresos propios para que representen el 60% del presupuesto del teatro y reducir progresivamente los gastos de estructura para que pasen del 66,7% actual al 58,1% en la temporada 2016-2017. Los sindicatos consideran que la aplicación de esta medida comportará despidos.