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El éxito de público avala el Sinsal en San Simón

Los recuerdos y la emisión radiofónica de los periodistas Iago Martínez y Emilio Alonso, así como un muro fotográfico virtual quedarán en la memoria del festival

La apuesta era original pero también complicada y, al principio, algunos no entendieron el juego. Pero las cerca de 900 personas que compraron su entrada para alguno de los dos días del Festival Sinsal San Simón, en la ría de Vigo, sin saber a qué conciertos iban a asistir, confiaron en la marca y vivieron la experiencia de un evento singular con diez ediciones a sus espaldas. “De momento, 850 personas que van a un festival sin conocer el cartel. Mucha responsabilidad”, escribía Julio Gómez, codirector del festival, en su cuenta de Twitter, horas antes del arranque.

Compartir un secreto une y vivirlo en un archipiélago como San Simón refuerza el vínculo. Respeto por el entorno, armonía, reposo y degustación sonora selecta, con propuestas musicales que no llegarían de otro modo a los circuitos escénicos cercanos son los valores de una programación que durante dos días vivieron los cómplices. Cien personas lo hicieron posible, entre artistas, técnicos, servicios y organización, artífices de un delicatessen en cuatro escenarios repartidos por los rincones de la isla.

A la convivencia no escaparon los músicos, convertidos en isleños por unas jornadas. Los primeros en desvelar el misterio fueron los belgas Hoquets, un trío que se construye sus propios instrumentos. Tras protagonizar un divertido y enérgico arranque al pie del embarcadero a modo de recibimiento, el grupo no se perdió un concierto en el resto del día. La banda franco-italiana L'Enfance Rouge tomó el testigo y amplió el torbellino con su rock experimental y acelerado con el Paseo dos Buxos de San Simón como telón de fondo.

 Sonidos árabes

La quietud se instaló durante un buen rato con propuestas de autor como las del sueco Christian Kjellvander, la viguesa Aries y las americanas Alela Diane y Maïa Vidal, entre los Buxos y San Antón y los sonidos árabes de Al-Madar, quienes hoy estarán en la Cidade da Cultura compostelana. La sucesión de electrónica, indie, noise y groove africano de Nite Jewel, Alt-J, Unicornibot y Shangaan Electro, respectivamente, además de la sesión del miércoles del locutor británico Simon Russell, volvieron a poner al público en pie para un fin de fiesta con muchas pulsaciones. Los recuerdos y la emisión radiofónica de los periodistas Iago Martínez y Emilio Alonso, así como un muro fotográfico virtual quedarán en la memoria del festival.

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