El Consistorio ha “tolerado” 10 años las molestias de un local ‘okupa’

Durante 10 años, el Ayuntamiento de Barcelona ha “tolerado” las molestias que genera un local okupa de Sant Andreu a los vecinos. La síndica de greuges de la ciudad, Maria Assumpció Vilà, ha denunciado la falta de “diligencia y eficacia” del Consistorio para solucionar los problemas de ruidos y falta de higiene provocados por el centro denominado La Gordísima. El Ayuntamiento, además, ha hecho la vista gorda ante actividades que, presuntamente, requieren licencia, ya que el local funciona también como bar y ha organizado multitud de fiestas y conciertos.

Ni los responsables políticos ni la Guardia Urbana han hecho lo necesario para “garantizar el derecho al descanso y evitar los reiterados problemas de salubridad, higiene y seguridad”, según la resolución de la síndica, que responde a las quejas de un vecino. Vilà, que ha comprobado la veracidad de la denuncia a través de sus técnicos, pide al Consistorio que busque “una solución definitiva” y alerta de los riesgos de seguridad por el “posible mal estado del edificio”.