_
_
_
_
SOCIEDAD

“Las instituciones deben garantizar el ocio”

María Jesús Monteagudo dirige desde hace siete años el foro Ociogune de la Universidad de Deusto

María Jesús Monteagudo, responsable del foro Ociogune de la Universidad de Deusto.
María Jesús Monteagudo, responsable del foro Ociogune de la Universidad de Deusto.SANTOS CIRILO

María Jesús Monteagudo trabaja en el Instituto de Estudios de Ocio de la Universidad de Deusto desde 1992 y dirige la Cátedra de Ocio y Conocimiento del Grupo Santander. Desde hace siete años, es la responsable del foro Ociogune, que se celebró la semana pasada en Bilbao.

El ocio en sentido amplio es uno de los sectores más sensibles a la crisis, pero Monteagudo resalta que también “es un espacio que te permite crear, pensar, soñar y avanzar para buscar estrategias nuevas”. “La coyuntura económica es importante, pero también hay una crisis de valores que afecta al ocio, que hoy se entiende estrictamente vinculado al consumo”, explica. “Hay muchas florituras superfluas que no son necesarias para que el ocio cumpla su función de elemento de desarrollo personal”, añade.

Monteagudo insiste mucho en ese concepto: “Desde la cátedra no entendemos el ocio como una mera actividad de tiempo libre, sino como una experiencia vital que se hunde en el terreno de la autorrealización, una forma de que la persona descubra sus habilidades y destrezas y mejore su calidad de vida”. la responsable del foro se pregunta si ese ocio tan arraigado en el consumo encadena y frustra al ciudadano en lugar de hacerle libre.

“Hay una crisis de entusiasmo, más allá de la de consumo”, afirma la especialista

Para reflexionar sobre la nueva realidad del ocio, la cita de la capital vizcaína se dividió en tres foros temáticos que contaron con diversos ponentes. Uno de ellos, el más crítico, se centró en las políticas de las Administraciones públicas. “El ocio es un derecho y las instituciones deben garantizarlo, pero vemos que los recortes han llevado al cierre de proyectos que supone un riesgo”. La directora de la Cátedra de Ocio menciona en este sentido, entre otras iniciativas, a Topaleku, una entidad de inserción social para expresidiarios que cerró sus puertas recientemente. “Miles de proyectos están viendo sus posibilidades anuladas, y apostar por el ocio es apostar por la salud”, dice.

Los otros dos grupos pusieron sobre la mesa el papel de los ciudadanos y de la industria, incluyendo a sectores culturales, turísticos o deportivos. Las cuestiones a debate se sucedieron: ¿es sostenible ese ocio optimista e insolidario de los tiempos de bonanza económica? ¿Va a suplir la ciudadanía la perdida de protagonismo de las instituciones? ¿Habrá una criba en la industria del sector? ¿Sobrevivirán los grandes grupos o predominará la calidad?

En opinión de Monteagudo, “más allá de la crisis de consumo hay una crisis de entusiasmo”. El ocio se erige así como una vía para escapar del pesimismo y apostar por un desarrollo personal, más humano y menos consumista. “El ocio no se puede vender, se puede promover, pero la experiencia no se compra con un billete de avión; debe buscarla uno mismo”, concluye esta especialista.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_