El PP resucita la “crispación social” tras el 11-M para atacar a los socialistas

El PP debatirá en su congreso de Bizkaia del 30 de junio una ponencia que defiende la política de recortes de Rajoy y la ruptura con Patxi López a través de una durísima requisitoria contra unos socialistas “responsables” de haber llevado a España “a la ruina”. En la diatriba encuentran eco incluso las acusaciones que los populares lanzaron en su día contra la victoria de Zapatero tres días después de los atentados del 11-M.

En cambio, casi no existen referencias al “desafío independentista” que para Antonio Basagoiti y su ejecutiva supone el principal reto que se va a ventilar en las elecciones autonómicas y en los meses venideros. De hecho, a lo largo de los 27 folios que firman las portavoces populares en Bilbao y Barakaldo, Cristina Ruiz y Amaya Fernández, respectivamente, apenas se alude de pasada al PNV y ni se cita de forma directa a la izquierda abertzale.

Con un discurso de confrontación con el nacionalismo que desdeña a los socialistas como rivales, Basagoiti arrancaba el 13 de mayo su nuevo mandato al frente del partido. Apenas ocho días después, el propio Basagoiti insistía en un acto en Bilbao: “Mi enemigo no es el PSE; no vamos a pelear contra ellos”. Vista la ponencia vizcaína parece que los socialistas aún son rescatables como tal enemigo.

El texto plantea abrir un debate “responsable” sobre la inmigración

El texto, que las dos ponentes concluyeron ayer, está abierto ahora a la presentación de enmiendas por los compromisarios hasta el próximo día 20.

La ponencia se remonta a 2004 para acusar a los socialistas de haber puesto punto y final a las reformas de Aznar que asentaron la que se llega a calificar como “la mayor etapa de prosperidad y bienestar jamás conocida” en España. A renglón seguido, el texto califica al PSOE de ser “arte y parte del ambiente de crispación social en que alcanzaron el poder”. En toda la primera legislatura de Zapatero (2004-2008), un pilar de la oposición de Rajoy fue acusar al PSOE de haber usado en su favor para ganar los comicios, cuando no directamente organizado, las manifestaciones de protesta que siguieron, especialmente en Madrid, al 11-M.

Esos socialistas que, cuatro años después basaron su campaña en “la mentira”, son los responsables, sigue la línea argumental de la ponencia, de los males económicos de un país al que dejaron “al borde de la quiebra”. El argumento de la herencia recibida explica que el actual Gobierno “de personas capaces y formadas” haya tenido que tomar medidas que no figuraban en su programa ni forman parte de su “bagaje de gestión”, aunque se pasa de puntillas sobre los recortes sociales.

“Las cosas con perspectiva se entienden mejor. No es lo que más destacaría ni pondría tanto el acento” en las críticas a los socialistas, dijo ayer Cristina Ruiz a EL PAÍS. La portavoz bilbaína se ha centrado más al redactar la ponencia en articular una serie de líneas de actuación para los próximos tres años en Bizkaia. Entre ellas figura la necesidad de abrir un debate “responsable y realista” y concretar “cuáles son las preocupaciones sociales” en Bizkaia en torno a la inmigración.