‘El Conquistador’ bate récords en Euskadi

ETB-2 ha dado en la diana de la audiencia con el programa El Conquistador del Fin del Mundo, presentado por Julian Lantzi. Después de mantener una popularidad creciente, con una audiencia de referencia, su final ha batido récords en Euskadi, donde en la noche del pasado domingo se convirtió en el programa de televisión más visto en esta comunidad en los últimos años, superando la barrera del medio millón de telespectadores. Esta cuota de audiencia, que expertos consideran la frontera para hablar en Euskadi de fenómenos televisivos, sólo la superan unos pocos partidos de fútbol, retransmisiones como Eurovisión y los capítulos estelares de unas pocas series como Cuéntame o Águila Roja. La final tuvo también un enorme seguimiento a través de Internet. En eitb.com los contenidos de televisión superaron los 21.000 usuarios únicos, el doble de lo habitual.

David Seco se ha proclamado ganador de la octava edición del reality ante una media de 278.000 telespectadores en Euskadi y su área de influencia. Fueron, además, 522.000 los telespectadores los que conectaron con la final que reunió a todos los concursantes y capitanes en directo en el plató y mostró las impresionantes imágenes del duelo en Iguazú. El programa líder de los domingos tuvo en la final un 31,1% de share. El minuto más visto fue a las 00.46 horas, con un 47,7% de cuota de pantalla, justo cuando David acabó la prueba de la tirolina y alcanzó la ikurriña que le proclamó nuevo Conquistador del Fin del Mundo.

El otro gran vencedor de la noche fue Ibon, quien se proclamó el Favorito del público y disfrutará de un viaje valorado en 3.000 euros. Entre los espectadores que votaron en la página web también hubo un afortunado que se irá de vacaciones a la Isla de Madeira: Marina Martín.

La final ha sido una de las más espectaculares de todas las ediciones. El escenario natural elegido para este año es inmejorable. Las cataratas de Iguazú son una de las siete maravillas del mundo y el programa de ETB es el único que disputa un juego en un Parque Nacional con la categoría de Maravilla de la Naturaleza.

La gala final sirvió, además, para reunir en un mismo escenario a todos los participantes y capitanes que han puesto colorido a la octava edición.