Fabra no convocará elecciones aunque le intervenga Rajoy
El presidente dice que el PP busca transmitir confianzal al electorado y ser serio y responsable EU tacha de estafa democrática el programa popular y exige adelantar los comicios La diputada Mayte Parra se enfrenta a Ignacio Blanco (EU) por asociarla a la corrupción
Un proceso electoral es caro. Costaría “más de 10 millones de euros”, según el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que se amparó de nuevo en la mayoría absoluta que consiguió hace un año su predecesor, Francisco Camps, para descartar una convocatoria de elecciones anticipadas, aunque falle el plan de reequilibrio de las cuentas autonómicas que ha de validar el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) el próximo día 17. Dicho de otra manera, aunque la Generalitat acabe siendo intervenida por el Gobierno de Mariano Rajoy, no se disolverán las Cortes Valencianas. “No voy a hacer ninguna convocatoria de elecciones”, aseguró Fabra en la sesión de control celebrada este jueves.
El jefe del Consell lo dijo en respuesta a la intervención de la portavoz de Esquerra Unida, Marga Sanz, que acusó al PP de haber perpetrado una “estafa democrática” al aplicar lo que calificó como “un programa oculto” con su política de recortes y privatizaciones. Ya el portavoz de Compromís, Enric Morera, había centrado su intervención en el plan de reequilibrio que ha de presentar la Comunidad Valenciana y que calificó de auténtico “examen” en una situación “gravísima”.
“Somos conscientes de la dificultad”, respondió Fabra, que añadió que “por eso los ajustes” antes de echar la culpa de todo a la herencia recibida del Gobierno de Rodríguez Zapatero y de los socialistas porque cometieron un “engaño” al esconder parte del déficit del Estado. El presidente de la Generalitat delató, sin embargo, que está preocupado de verdad cuando se felicitó retóricamente: “Hemos avanzado porque usted ya no habla de intervención”. El portavoz de Compromís le respondió: “O defiende los intereses de los valencianos o le hace caso a Rajoy”. Morera dijo que, en este último caso, “tendrá que convocar elecciones”. “La Comunidad Valenciana va a dar la cara en el Consejo de Política Fiscal”, insistió Fabra.
La oposición carga contra el Consell por el paro, la deuda y los recortes
El presidente de la Generalitat, aprovechó la pregunta del síndic del Grupo Popular, Rafael Blasco, para presumir de que en el Comité de las Regiones consiguió esta semana introducir sus propuestas a favor del arco mediterráneo y en defensa de la agricultura valenciana y tuvo un áspero debate con el portavoz socialista, Antonio Torres.
La tasa de paro, que supera el 27%, “es la más alta de la historia de la Comunidad Valenciana”, le afeó Torres, que se preguntó: “¿Dónde están las medidas de impulso?”. Fabra le respondió que su Gobierno actúa con “rigor, seriedad y responsabilidad” y acusó de frivolidad al PSOE. “Rechazaron ustedes nuestra propuesta de plan de empleo juvenil”, le recriminó Torres, en alusión a una iniciativa que defendió su predecesor, Jorge Alarte, y anunció que los socialistas esperan mejor suerte a otro plan que plantean ahora “para parados con cargas familiares en colaboración con Ayuntamientos y Diputaciones”. La invitación no tuvo eco alguno en el presidente.
El socialista Torres insiste en un plan para parados con cargas familiares
Fabra esgrimió durante su intervención dos gráficos para demostrar que en la Comunidad Valenciana se está creando ocupación, algo que, en teoría, contraviene las normas dictadas por el presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino, sobre el comportamiento de los diputados, unas normas en las que se prohíbe mostrar documentos gráficos o audiovisuales. En todo caso, no hizo advertencia alguna al jefe del Consell.
Los turnos de repreguntas permitieron al socialista Rafael Rubio recriminar al Consell que su programa para emprendedores no funciona y a Mireia Mollà, de Compromís, poner en duda el “rigor” de la Generalitat cuando la Unión Europea exige que se devuelvan las ayudas concedidas a la Ciudad de la Luz, lo que puede suponer 265 millones de euros. El consejero de Economía, Máximo Buch, a su vez, tuvo ocasión de afirmar que “el PP no nacionaliza nada” y de defender que el Estado sólo pasará a ser “un socio adicional” de Bankia.
La diputada que perdió los nervios
Los diputados de Esquerra Unida leyeron este jueves pasajes del programa del PP para afear sus incumplimientos. Lluís Torró mostró incluso un ejemplar sin que Cotino le dijera nada en nombre del decoro y el buen comportamiento. Sí que trató el presidente de las Cortes de reprender a su compañero de grupo Ignacio Blanco porque en su opinión se desvió de tema que se debatía al citar una frase sobre la corrupción y enumerar uno por uno a los diputados del PP “imputados o investigados”. Entre ellos, se refirió a Mayte Parra, alcaldesa de Ibi, “con cuenta en Suiza”.
Al concluir la sesión, Parra se fue a buscar, visiblemente alterada, al parlamentario de Esquerra Unida en los pasillos de la Cámara, negó la denuncia de que ha sido objeto y amenazó con acciones judiciales. Tuvo que sujetarla la también diputada popular Carmen Amorós para evitar que perdiera del todo los nervios.
Parra niega que tenga, como sostiene una denuncia, una cuenta en Suiza con más de un millón de euros, junto a otra similar de su primer teniente de alcalde, Miguel Ángel Agüera. La información está en manos del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ibi, donde la presentó una exconcejal del Ayuntamiento que la recibió de forma anónima. La exconcejal solicita personarse en una causa abierta en el juzgado sobre una trama de comisiones ilegales en obras ejecutadas en el municipio. La denuncia aporta los números de las cuentas corrientes en Suiza supuestamente a nombre de la alcaldesa y su teniente de alcalde, señala que las cantidades de 1,2 y 1,3 millones son “el resultado de ingresos realizados por una empresa adjudicataria de obra pública” en Ibi y añade que los datos “han sido solicitados por la Interpol”. Aún no se ha producido una decisión judicial sobre el asunto.
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