Castedo rechaza crear un fondo social con las dietas de los ediles

Con un escueto y contundente “no se va a atender el ruego” se zanjó la cuestión. Tema descartado. El equipo de gobierno que preside Sonia Castedo, del PP, se valió el lunes de su mayoría absoluta para rechazar tajantemente el ruego planteado por Esquerra Unida para crear un fondo social municipal con la renuncia de los concejales con dedicación exclusiva al dinero de las dietas, gratificaciones e indemnizaciones que cobren por asistir a otros órganos municipales (como los patronatos) o consejos de administración de firmas participadas por el Ayuntamiento.

La iniciativa era la segunda parte de una propuesta que tuvo su primer asalto en el pleno anterior y en la que EU instaba a los ediles renunciar a estas dietas, al igual que proponía que aquellos que cobren de otra Administración (como ocurre con la alcaldesa Sonia Castedo, diputada en las Cortes Valencianas) renunciaran al dinero que cobran por pleno. El PP también lo rechazó, asegurando que era una decisión personal a la que no podían obligar a nadie. Ayer remitieron a este argumentario para rechazar la segunda parte. Y ello, a pesar de que la oposición estaba de acuerdo en renunciar y a que en los últimos días lo había comunicado públicamente para presionar al equipo de gobierno. De nada sirvió.

EU pretendía que el fondo social (que solo con las dietas de los consejos de administración de Aguas de Alicante y de Emarasa tendría 60.000 euros al año) sirviera para evitar desahucios, ayudar al pago de tasas e impuestos municipales a aquellos ciudadanos en situación más precaria o a realizar aportaciones a bancos de alimentos. El portavoz socialista insistió en su defensa del ruego en la importancia de renunciar a estas dietas “en la actual situación de crisis con la gente pasándolo mal”.

Tras el pleno, el portavoz de Esquerra Unida, Miguel Ángel Pavón, que días antes había anunciado su disposición a renunciar a unos cobros que consideraba “injustificados”, anunció que su formación estudiará crear su propio fondo para destinarlo a aquellas cuestiones sociales que considere más urgentes. EU defendió que quiere evitar que ese dinero se lo quede el Ayuntamiento e insistió en su voluntad de que tenga un fin social. El PSPV-PSOE, mientras, ya renunció formalmente a cada una de estas dietas.

La regidora estudiará

En el pleno de ayer, por otro lado, la alcaldesa de Alicante anunció que no recurrirá la sentencia del juzgado de los Contencioso-administrativo número 2 de Alicante, que a principios de abril estimaba el recurso interpuesto contra la resolución del Ayuntamiento de Alicante en la que declaraba ruina legal a las 36 viviendas que componen el barrio Heliodoro Madrona, pegado al puerto de Alicante. Castedo aseguró que no va a recurrir ni tampoco va a “instar a nada”, en referencia implícita al puerto de Alicante. Con este anuncio, Castedo deja en manos del puerto cualquier decisión sobre este barrio portuario de mediados del siglo pasado.

Por otro lado, la alcaldesa de Alicante abrió la puerta a estudiar una permuta para incorporar a la propiedad municipal el antiguo asilo de Benalúa, ahora propiedad del Obispado de la Diócesis Orihuela-Alicante, a cambio de suelo para edificar en alguna otra zona de la ciudad. El anuncio se produjo después de que el PP rechazara una moción de EU para incorporar el asilo en el catálogo de bienes y espacios protegidos y darle a los terrenos la calificación de dotacional para posibilitar que albergue la Audiencia Provincial. Todos los grupos de la oposición (PSPV, EU y UPyD) insistieron en la importancia de preservar este edificio de 1885 con jardines centenarios y una cripta histórica donde están enterradas personalidades alicantinas como el Marqués de Benalúa.