Mas escenifica su acercamiento a ERC en su primera reunión con Junqueras

El Gobierno catalán guarda para Esquerra Republicana un papel destacado en la segunda mitad de legislatura, dado el consenso que existe entre ERC y CiU sobre la necesidad de que Cataluña logre un pacto fiscal análogo al concierto económico vasco. La alianza entre CiU y el PP para llevar adelante los recortes ha alejado los puntos de partida de republicanos y nacionalistas en la primera mitad de mandato; aunque, tras alzarse con la presidencia de ERC, Oriol Junqueras ha tendido puentes con el Gobierno para ocupar un puesto central en la política catalana. La insistencia de Junqueras ha tenido recompensa esta mañana: el presidente de la Generalitat, Artur Mas, se ha entrevistado con el líder de ERC en la primera reunión de la tanda que celebrará Mas con el resto de las formaciones políticas para hablar de pacto fiscal. Según ambas partes, el encuentro ha sido "muy positivo". Era la primera vez que Mas y Junqueras se reunían de forma oficial. "La reunión ha sido cordial, positiva, correcta", ha señalado el portavoz de la Generalitat, Francesc Homs. En paralelo a un calculado distanciamiento del PP, Mas ensaya un tímido acercamiento a los republicanos.

ERC espera que lo hablado en la reunión se traduzca en resultados. "La proximidad del Gobierno con Esquerra no depende de las palabras, sino de los hechos, y por tanto la determinarán las decisiones que tome el Ejecutivo", ha dejado claro Junqueras. El tono de la reunión ha gustado al líder republicano, que ha salido del encuentro con el compromiso del Ejecutivo de acelerar los trámites para exigir al Gobierno central el pacto fiscal: por una parte, la votación en el pleno del Parlament, antes del verano, de las conclusiones de la comisión que estudió la propuesta; por otra, la aprobación en la cámara de la ley de consultas, que está en trámite. La intención de los dos partidos es que se apruebe como máximo tras las vacaciones de verano, con el fin de disponer del instrumento para convocar un referéndum sobre el pacto fiscal. 

Para CiU y ERC, el modelo de pacto fiscal tiene un punto irrenunciable: que Cataluña tenga "la llave de la caja", es decir, que gestione todos los impuestos y después se fije el cupo que debe pagar al resto de España. En el encuentro se ha tratado del interés del Gobierno en sumar al Partit dels Socialistes (PSC) al consenso por el pacto fiscal. ERC lo acepta, siempre que no se suavice el modelo: "ERC no participará en ningún regateo de cantidades", ha avisado Junqueras. CiU apuesta por una propuesta que ya aceptaron los socialistas en su día: la financiación que recogía el Estatuto que aprobó el Parlament el 30 de septiembre de 2005, después recortado en el Congreso y enmendado por el Tribunal Constitucional. "Hay que ampliar lo máximo posible el acuerdo que hay ahora mismo", ha reclamado Homs, en referencia a los socialistas. Mas seguirá en las próximas semanas la ronda de contactos para hablar del pacto fiscal, aunque todavía no hay ningún otro encuentro en la agenda.